La Arquidiócesis de Puebla dio a conocer que seguirá adelante con el el proyecto de la construcción de una nueva capilla Santísimo Sacramento, mientras que el párroco que fue agredido el pasado domingo interpondrá la denuncia correspondiente.
A través de un comunicado, detalló que un grupo de choque integrado por 40 personas, algunas de ellas en posible estado de ebriedad, irrumpió de forma violenta en el templo parroquial, para exigir la cancelación de la construcción de la nueva capilla.
Explicó que dicho proyecto de construcción tiene el objetivo de conmemora el 500 aniversario de la celebración de la primera misa en la comunidad por Juan Díaz, capellán de Hernán Cortés y los 300 años de la edificación del templo parroquial.
«La nueva capilla se dedicará a la adoración perpetua del Santísimo Sacramento y estará por consiguiente, abierta las 24 horas del día para el culto al Señor».
Además, descartó que -como denunciaron algunos fieles -, no se va a quitar o retirar el Santísimo Sacramento del templo parroquial, sino que ahora se contará con un lugar adicional para su adoración.
La Arquidiócesis insistió que el proyecto cuenta con la autorización del INAH, también de la comunidad en general, grupos parroquiales y equipos litúrgicos.
Por ello, llamó a la gente que está en contra a entablar una mesa de diálogo con el Comité Pro Construcción, el cual rendirá cuentas de manera continua, oportuna y transparente sobre los ingresos y egresos de dicha obra.
El párroco Pbro. Mario Pérez Pérez, presentará la denuncia correspondiente ante la Fiscalía del Estado, por los delitos de allanamiento en propiedad federal; agresiones y golpes a feligreses presentes para la misa y miembros del equipo litúrgico (en su mayoría integrado por personas de la tercera edad); y allanamiento de morada, ya que ingresaron por la fuerza a la casa del párroco; así como por los delitos que puedan resultar de estos actos.