Álvara Ramírez Velasco
Ninguna familia afectada por la explosión de gas que el domingo causó una tragedia en San Pablo Xochimehuacán ha sido desatendida por el gobierno estatal.
Así lo hizo saber el mandatario de Puebla, Miguel Barbosa, en entrevista en Radio Fórmula, para el periodista José Cárdenas; indicó que las investigaciones sobre el robo de gas que provocó la muerte de un hombre y la devastación de viviendas van muy adelantadas.
Se sumó al llamado que hizo la mañana de ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador a la población, para que denuncie estas actividades ilícitas que ponen en riesgo a todos.
La actividad rápida de diversas instituciones del estado pudo desalojar hasta más de dos mil personas (la madrugada el domingo), y poder impedir una gran tragedia, agregó.
Barbosa destacó que deberán reconstruirse 64 casas que quedaron destruidas y que se analizará la reubicación de viviendas en lugares seguros, y ya no más en sitios prohibidos, como solaparon autoridades pasadas.
Sobre el robo de gas LP, recalcó que es una actividad de bandas criminales y mafias e instó a la población a denunciar en forma anónima.
“Yo mismo recibo las denuncias y los señalamientos… Esto no va a quedar impune”.
Aseguró que todos los afectados han sido atendidos, sin excepciones, y que todos los daños han sido censados.