Entre la semana pasada y la que inicia este lunes 4 de mayo, un total de 20 estados, de los 50 en Estados Unidos, habrán abierto parte de sus economías pese a que la pandemia de coronavirus continúa afectando gran parte del país.
En algunas regiones han sido cuidadosos desde el principio, lo que ha reducido el número de casos, mientras que en otros puntos los gobernadores han privilegiado la recuperación económica.
En total, 118 millones de estadounidenses se reintegrarán a sus labores y a parte de su vida cotidiana, según las estimaciones poblacionales de NBC. Ello, siguiendo las determinaciones de sus gobernadores, que continúan con la línea del presidente Donald Trump, quien deseaba que el país reabriera con normalidad a partir del 1 de mayo.
Los estados que optan por la reapertura en este momento no se reactivarán al ritmo regular, sino mediante pequeños pasos adelante.
En las últimas semanas, a pesar de que Nueva York, el estado más afectado por la enfermedad hasta ahora, ha reducido sus números en nuevos contagios y decesos, la propagación de la enfermedad en el país continúa a la alza. Hasta el momento, un millón 156 mil 942 ciudadanos se han contagiado de COVID-19 y 67 mil 498 personas han perdido la vida como consecuencia de la enfermedad.
Este domingo por la noche, la nación esperaba un mensaje del presidente Trump, quien realizará un evento de campaña para proponer el regreso al trabajo y la apertura económica, lo que podría suponer un nuevo impulso a que nuevos estados reabran sus actividades; un paso que para los expertos de la Casa Blanca y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), no debería darse aún en la totalidad del país.
Con información de Notimex