A la casona que estuvo en el número 126 de Avenida Reforma fue traído, desde Acatzingo, el mando del Ejército de Oriente que cuatro meses antes dirigió la batalla victoriosa contra los invasores franceses. Llegó con fiebre de 42 grados y los síntomas del tifus que acabó con su vida el 8 de septiembre de 1962.
Fotos: Archivo Municipal