El Instituto de Biotecnología de Beijing y la compañía Cansino Biologics, que trabajan en conjunto para desarrollar una vacuna contra la COVID-19, anunciaron los resultados de la fase I de la primera vacuna que se pone en marcha en el país asiático.
De acuerdo con un artículo publicado en la revista The Lancet, los 108 voluntarios que participaron en el experimento toleraron la vacuna, por lo que resultó segura, además de que permitió que crearan anticuerpos tipo T.
Los resultados aún no significan que la vacuna vaya a estar disponible, pero desde abril inició la Fase II, que incluye ensayos con 500 pacientes para especificar más la dosis que es adecuada para que proteja contra la infección de SARS-CoV-2, virus causante de la COVID-19.
En el mundo se están impulsando más de 100 proyectos para la creación de una vacuna contra el SARS-CoV-2 y sus consecuencias médicas. Otro proyecto, estadounidense, planea iniciar pronto la fase III de una vacuna que, de funcionar, podría estar disponible para el otoño.