Diana López Silva
El reparto de candidaturas que se da en la coalición Frente amplio por Puebla “es malo” y se ha minimizado el valor del PAN frente a sus aliados, que son el PRI, PRD y PSI, lo que será un referente del trabajo de la dirigencia estatal, que encabeza Augusta Díaz de Rivera.
“La verdad, nos dimos menos valor del que teníamos nosotros en el PAN y quien negoció, me queda claro que aliado del PAN no es y no le interesa el partido, porque hoy el PRI tiene más sillas”, sostuvo.
El vicecoordinador de la bancada panista en el Congreso local recordó que tan sólo el PRD estuvo a punto de perder su registro en la elección pasada.
“Y yo no veo hoy que pueda alcanzarlo, al menos, es altamente probable que las pocas candidaturas que tiene queden solamente en la familia de un par de dirigentes de ese partido”, expresó.
Al referirse a la dirigencia estatal del PAN, expresó que “por sus hechos los conoceréis y si quiere seguir ahí, que siga, el tiempo dirá si el resultado que dio fue mejor o no”.
Manifestó que una vez terminadas las elecciones, “se podrá contrastar con el resultado qué fue lo que hicieron bien o mal, lo que sí me queda claro es que lo que hoy están haciendo es seguir administrando el segundo lugar”.
A todo esto le sumó los cuestionamientos generados después de que el propio presidente nacional del PAN, Marko Cortés, revelara las negociaciones que se tuvieron con el PRI para la repartición del gobierno en Coahuila.
En ese sentido, previó que el PAN perderá al menos dos espacios en su próxima bancada en el Congreso local, que hoy es de nueve integrantes, como consecuencia de la fallida repartición de candidaturas en el Frente amplio por Puebla.
Alcántara Montiel agregó que esto también se deberá “a una mala administración del partido” y a negociaciones hechas con el PRI en otros estados.
“La bancada que viene va a ser más chica que la actual, podrían tener siete diputaciones de mayoría relativa y tres pluris si ganan todos los distritos”, finalizó.