Así lucía la alberca del sitio donde había clases y entrenamiento para nadadores, con agua sulfurosa.
En Puebla capital era el sitio donde los atletas podían realizar sus rutinas.
Con el paso del tiempo y cambio en el uso, se dejó como recuerdo una parte del trampolín. Aún puede verse desde la Avenida Juárez, entre las calles 17 y 19 Sur.
En ese punto se encontraba la entrada principal.