Los tres desgajamientos de cerros ocurridos en Huauchinango los últimos 30 días –el más reciente el miércoles pasado, que sepultó a un hombre que trabajaba en una construcción– ocurren por falta de acciones para revertir deforestación y erosión.
Así lo advierte el Cenapred, para los 49 municipios con alto riesgo en laderas, una superficie de 7 mil 346.78 kilómetros, entre los cuales se encuentra Huauchinango.
El Centro Nacional de Prevención de Desastres determina que esos municipios se encuentran dentro del 18% del territorio nacional que está expuesto a colapsos o inestabilidad de laderas naturales.
Las condiciones se agravan con deforestación, erosión y los asentamientos humanos irregulares. Estos factores se acrecientan con llegada de la temporada de lluvias.
El desgajamiento de antier en la Sierra Norte ocurrió en la comunidad de Tlachichila.
Un grupo de personas trabajaba en una construcción, cuando ocurrió el percance. Quedó sepultado un hombre de 30 años de edad, mientras dos personas resultaron heridas y trasladadas al hospital.
Antes, la fuerte precipitación pluvial del pasado 21 de septiembre en la entidad provocó caída de árboles y piedras, así como deslaves en 30 municipios, entre ellos Huauchinango, y fueron atendidas por la Coordinación General Protección Civil Estatal junto con voluntarios.
El 7 de septiembre pasado, Protección Civil Estatal, en conjunto con la Dirección de Protección Civil Municipal de Huauchinango, atendió afectaciones causadas por un deslizamiento de tierra al exterior de una vivienda, sin que se registraran heridos.
La Secretaría de Gobernación del estado dio a conocer que las familias que se ubican en laderas de ríos y barrancas, así como zonas establecidas irregularmente, deben tomar previsiones ante las lluvias que todavía se esperan.