El Club Puebla sueña con clasificar a la Liguilla 17 de su historia, pero para eso deberá dar el batacazo y eliminar a Monterrey en el estadio BBVA, en la fase de repechaje, instancia que no le es incómoda, ya que en los tres que ha participado anteriormente, en dos salió victorioso.
La nueva normalidad del futbol mexicano por la pandemia hizo modificar el formato de competencia de la Liga MX, regresando a la vida el repechaje, fase de eliminación que fue usada por primera vez en México en 1992, pero que fue enviada al congelador desde 2008.
Por ende, de ocho clasificados directos a la Liguilla que normalmente había, se abrió el abanico a 12 equipos, bondades que le permitieron a La Franja con sus 20 puntos sumados en 17 partidos volver a avanzar a una fase final.
19 AÑOS DESPUÉS, DE NUEVO AL REPECHAJE
Gracias a su agónico triunfo en la Jornada 17 ante Atlético San Luis y a que FC Juárez no le pudo ganar al América, los camoteros se metieron a la repesca, la cual no disputan desde el torneo Verano 2001, cuando contrario a lo sucedido en este Guard1anes 2020, se vieron afectados por el entonces sistema de competencia, ya que no pudo avanzar de forma directa a la Liguilla a pesar de haber sumado 27 puntos y colocarse en el quinto de la tabla general.
Debido a que en esa época los equipos se dividían en dos grupos de cinco integrantes y otros dos de cuatro, y como los de la Angelópolis quedaron en el tercer lugar del sector 3, los dirigidos por Mario Carrillo se tuvieron que jugar su pase a la Fiesta Grande contra Atlas.
Sin embargo, salieron victoriosos al imponerse en una serie de ida y vuelta por marcador global de 5 a 4, lo que les permitió acceder a la Liguilla donde vacunaron a Tigres en cuartos de final por 5 a 3, pero en la antesala de la final cayeron ante Santos al haber empatado 6 a 6, pero los laguneros terminaron la fase regular en mejor posición en la tabla general y eso les dio el pase.
Esta herramienta de clasificación comenzó a usarse en el futbol mexicano a partir de la temporada 1991-92, cuando los 20 equipos de la justa se dividían en cuatro grupos y los mejores dos de cada sector iban a liguilla, pero si un tercer lugar superaba en puntos a un segundo, jugaban repechaje a dos partidos.
Desde entonces, los de la Angelópolis han recurrido a este método de eliminación en tres oportunidades, siendo la última la ya señalada en el 2001. La primera fue en la campaña 1994-1995, cuando hizo 40 puntos y terminó en séptimo lugar general, por lo que se midió en el duelo de reclasificación ante Veracruz y avanzó a pesar de haber terminado 1 a 1 en el global, gracias a su mejor posición en la tabla.
Ya en la Liguilla, el cuadro que era comandado por Alfredo Tena sucumbió en cuartos de final ante América por marcador de 4 a 2.
EL VERANO 98, CON PEORES NÚMEROS QUE EL ACTUAL
La única ocasión en que el Puebla ha sido eliminado en un repechaje fue en el torneo Verano 1998, cuando casi sin querer avanzó con apenas 18 puntos sumados en 17 partidos, pero que le permitieron terminar como segundo lugar del grupo 1, aunque se colocó en el escalón 15 de la tabla general, números de mayor pobreza que los que logró en el actual Guard1anes 2020 en el que finalizó en el eslabón 12 con 20 unidades.
Los blanquiazules, que tenían a Raúl Cárdenas como entrenador, demostraron que no estaban preparados para pelear por un sitio en la Liguilla y fueron eliminados por Tecos que los doblegó por 5 a 3.
EN 49 AÑOS HA CLASIFICADO A 16 LIGUILLAS
Los playoffs, fase final o mejor conocida como Liguilla llegó al futbol mexicano para la temporada 70-71 gracias a la iniciativa de los entonces dueños de los equipos, con el objetivo de generar más ingresos y hacer más competitiva la liga.
De esa primera Liguilla disputada en 1971 en la que se coronó campeón América al superar a Toluca en la gran final, han pasado 49 años de los cuales, el Puebla ha logrado clasificarse a un total de 16 y solo en dos pudo coronarse campeón.
La primera fase final a la que se clasificó fue en la de la temporada 1973-1974 en la que, dirigido por Ignacio Trelles, logró un total de 40 puntos y se metió directo a semifinales ante Cruz Azul, equipo que era el entonces bicampeón de la Liga, y ante el que perdió por global de 7 a 2.
LA ÉPOCA DORADA: NUEVE LIGUILLAS EN NUEVE AÑOS
Tuvieron que pasar nueve años para que la capital poblana volviera a vivir la Fiesta Grande del futbol mexicano, ya que fue hasta la temporada 1982-1983 cuando los camoteros volvieron a unos playoffs y lo hicieron para hacer historia.
Comandados por Manuel Lapuente, los enfranjados sumaron 45 puntos en los 38 partidos de la temporada y avanzaron como tercer lugar general.
En los cuartos de final le pasaron por encima a Tecos por 4 a 2, para después hacer lo propio con Leones Negros al que le pegaron por 4 a 3, y en la gran final vencieron a Chivas para obtener su primer título de Liga en un partido que se fue hasta los penales.
Si bien fue hasta 1985 cuando pudieron reaparecer en una Liguilla, ahí comenzó la época dorada de la institución, ligando ocho clasificaciones seguidas a la instancia final, y si bien solo logrando un título de Liga más en la temporada 1989-1990, se convirtió en un animador constante del futbol mexicano.
LA ÉPOCA OSCURA: SEIS LIGUILLAS EN 28 AÑOS
Sin embargo, una vez terminó la mejor etapa en su historia, La Franja cayó en una oscuridad que se ha alargado durante los últimos 28 años, desde que perdió la final de Liga en 1992 ante León, lapso en el que apenas ha podido brindarle en siete ocasiones la emoción a sus seguidores de pelear por un título.
A las ya referidas Liguillas a las que accedió a través del repechaje en 1995 y 2001, se le suman otras cinco postemporadas en la que obtuvo su boleto de forma directa gracias a lo hecho en la fase regular.
El primer torneo en el que se ganó a pulso su pase fue en el Invierno 1996, con Aníbal Maño Ruiz en el banco y La Franja naranja de los Ejecutivos, en el cual sumó 31 puntos en 17 jornadas y clasificó en cuarto lugar general, doblegando en cuartos de final a Toluca por 2 a 1, pero quedando evidenciado por el Necaxa de Manuel Lapuente, que los echó en semis con un 7 a 3.
Fueron 13 años los que tuvieron que pasar para que los blanquiazules regresaran de forma directa a una Liguilla, pues en los torneos Clausura y Apertura 2009, de la mano de José Luis Sánchez Solá y los chelisboys, pelearon por el campeonato, primero llegando hasta semifinales donde fueron eliminados por Pumas y a la siguiente campaña quedándose en cuartos de final donde Cruz Azul les ganó.
La ocasión más reciente en la que la afición camotera ha tenido la ilusión de ver a su equipo como contendiente al título fue en el Apertura 2015, certamen en el que se metieron hasta los cuartos de final, tras terminar el torneo con 27 puntos y avanzando en el séptimo sitio de la clasificación.
Pero la escuadra que entrenaba el argentino Pablo Marini no pudo ante Toluca y perdió por global de 4 a 3.
Desde entones han sido cinco años sin que el Puebla vuelva a ilusionar a sus seguidores, pero ante Monterrey, volverá a tener la oportunidad de resarcirse.
SE HACEN LAS VÍCTIMAS, PERO MONTERREY ES SU CLIENTE
Si bien la actualidad de ambas escuadras le da un claro favoritismo a Monterrey para eliminar al Puebla en este repechaje a partido único, los antecedentes llenan de esperanza a los poblanos, ya que en las dos ocasiones en que se han visto las caras en rondas finales, han salido victoriosos con marcadores contundentes.
Será la primera ocasión que se midan en un repechaje, pero en Liguilla se han visto las caras en cuartos de final, primero en la temporada 1990-1991 en la cual los enfranjados dieron cuenta de los regios por global de 4 a 1, mientras que en el Clausura 2009 les pegaron por acumulado de 5 a 3.
Sin embargo, dentro del Puebla admiten que para esta ocasión su papel es el de víctima, al menos así lo dijo el director de Desarrollo Deportivo, Carlos Poblete, quien asumió que son los menos favoritos, aunque aluden a las “sorpresas” que se dan en el futbol para soñar con romper la maldición de cinco años sin disputar una Liguilla.
“Nos consideramos un participante más, un candidato al título, si uno quiere ser campeón debe ganar todas las llaves, aunque lógicamente somos menos favoritos que otros equipos, vamos como víctimas propicias para Monterrey, pero el futbol tiene muchas sorpresas y ojalá esta sea una de esas, no somos caballo negro, sí podemos competir, nadie le tiene asegurado el resultado a Monterrey”.
La fecha probable para este partido será el sábado 21 de noviembre, aunque será la Liga la que defina el día previo al cotejo para el que el técnico Juan Reynoso ya podría contar con plante completo, pues recuperaría a los lesionados Daniel Arreola y Osvaldo Martínez y los contagiados de ccoronavirus podrían ser dados de alta.