McDonald’s y Starbucks, dos de las cadenas estadounidenses de restauración más populares, han sufrido en el último trimestre del pasado año bajadas en sus ventas por el boicot de grupos pro palestinos en distintas partes del mundo, según han reconocido este lunes ambas empresas.
Las dos cadenas han sido señaladas por distintas razones como favorables a Israel y sufren un boicot desde hace meses, el de Starbucks centrado en Estados Unidos, mientras que McDonald´s lo ha notado más en franquicias en paÃses musulmanes.
El director ejecutivo de McDonald’s, Chris Kempczinski, reconoció hoy que su compañÃa ha sufrido un bajón en ventas en paÃses islámicos como Indonesia y Malasia, o en otros europeos como Francia, donde los musulmanes suman millones.
Tras comunicar hoy sus resultados trimestrales, las acciones de McDonald´s caÃan esta tarde un 3,83 %, una de las caÃdas más pronunciadas en Wall Street, y el mismo Kempczinski auguró que la situación no mejorará en los paÃses musulmanes en el próximo trimestre.
Para McDonald´s, todo empezó cuando el propietario de la franquicia en Israel, Alonyal Ltd, anunció al poco de empezar la guerra en Gaza que iba a alimentar de forma gratuita a los soldados israelÃes y a todos los que estuvieran en primera lÃnea; casi de inmediato, comenzaron las llamadas al boicot desde varios paÃses.
Aunque la compañÃa ha insistido en que las iniciativas de sus franquiciados no responden a una polÃtica central de la casa madre, lo cierto es que la conocida marca de hamburguesas figura desde hace tiempo entre las empresas señaladas por el movimiento pro palestino BDS (boicot, desinversión, sanciones).
En el caso de Starbucks, el boicot tiene más que ver con el combativo sindicato Workers United, con cientos de locales asociados en Estados Unidos, cuando sus trabajadores postearon en X un mensaje en solidaridad con Palestina a los pocos dÃas de empezar la guerra, la empresa salió a matizar que esa no era la postura corporativa.
Desde entonces, ha sufrido ataques, virtuales o fÃsicos en los mismos cafés, de manifestantes pro palestinos, asà como un boicot.
El CEO de Starbucks, Laxman Narasimhan, reconoció hoy que sus ventas se han resentido en sus locales en Oriente Medio, pero también en Estados Unidos, sobre todo entre los clientes «ocasionales». Sus acciones esta tarde bajaban levemente (-0,55 %), pero no dejan de caer desde mediados de noviembre.
Con información de EFE