Por: Diana López Silva
Poblanos manifestaron posturas polarizadas respecto al tema de la prostitución en el Centro Histórico y la posibilidad de que haya una zona de tolerancia; sin embargo, coincidieron en la necesidad de atacar de fondo las causas de la desigualdad, las redes delictivas y la explotación.
Para Susana Fernández, el tema es muy complejo. Señaló que se ha normalizado tanto que nunca se lo había cuestionado.
Por ello destacó la importancia de escuchar a quienes se dedican a la prostitución y atender de manera enfocada sus necesidades, para atacar el problema de fondo.
Opinó que no se trata de permitir o negar una zona restringida, sino de ayudar a las mujeres y combatir las redes de explotación que suelen amenazarlas.
“Nunca me lo había cuestionado. Debería haber gente que realmente se preocupe, porque esas mujeres tienen muchísimos problemas que no les han volteado a ver”, dijo.
DEBEN IRSE DEL CENTRO
En tanto, Rocío Juárez, joven madre de familia y trabajadora, señaló de manera tajante que no se debe permitir la prostitución en el Centro Histórico, pero sí en alguna zona permitida de la periferia, al reconocer que actualmente todas las personas viven una etapa económica difícil.
Mencionó la importancia de involucrar la vigilancia policiaca en tareas de verdadera investigación, para evitar la trata y explotación de menores.
“Porque uno ve fácil quién las está vigilando, pero la policía ‘no lo ve’; no hay policía en esas calles”, expuso.
UN TRABAJO DE SUFRIMIENTO
Entre quienes se pronunciaron a fevor de prohibir completamente la prostitución en la ciudad está Irma Reyes, joven oficinista, quien señaló que la prostitución es un oficio añejo “que deja más sufrimiento que beneficio”, y no sólo para las sexoservidoras, sino para sus familias y, principalmente, para sus hijos.
Por ello, aseveró que es una práctica que debe ser erradicada de las calles del Centro Histórico de Puebla.
Finalmente, también en contra de que se permita una zona de tolerancia opinó Jesús Ibáñez, joven estudiante, quien apuntó que esa ocupación tiene un trasfondo de explotación sexual, por lo que se pronunció a favor de asistirlas a fondo, para que las mujeres logren su independencia económica de formas alternativas