Esta imagen fue captada en 1911, en la cabecera municipal de Atlixco.
Los maderistas armados llegaron a ese sitio y encontraron respaldo total de los obreros de las fábricas textiles, cansados de la explotación de 13 horas diarias a las que eran obligados a trabajar.
Algunos se unieron a las fuerzas revolucionarias.
Foto: Mi México Antiguo