Fotos: EFE
En la colindancia con Ciudad Juárez, el gobierno de Estados Unidos envió cuadrillas ayer para reforzar el muro.
En Tokyo, donde estos días estarían de vacaciones los atletas olímpicos, de haber perdonado al mundo la pandemia de COVID-19, una ola de calor golpea las ciudades con temperaturas de desierto: 40 grados que allá no se soportan. Las albercas, por eso, estuvieron repletas.
En España, el clima se decanta en relámpagos sobre las ciudades donde rebrota el virus que tiene al mundo de cabeza.
Pero en Macedonia –arriba de Grecia, entre los mares Egeo y Adriático–, cara al cielo, es posible asistir al espectáculo de agosto, la lluvia de estrellas Perseidas, trozos de roca que avienta el cometa 109P/Swift-Tuttle y que sacan fogonazos y chispas enormes al golpear la atmósfera.