Diana López Silva
El debate por la distribución de la vacuna contra la COVID-19 llegó al Congreso local, donde se abordó si el gobierno federal debe o no permitir la venta de las dosis a particulares, así como la decisión de cederla a los países más pobres.
La propuesta de permitir la venta de la vacuna por particulares fue puesta sobre la mesa por el diputado sin partido Carlos Morales Álvarez, los perredistas Liliana Luna Aguirre y José Armando García Avendaño.
Además de Guadalupe Esquitín Lastiri, de Movimiento Ciudadano; por Compromiso por Puebla, Uruviel González Vieyra; y Héctor Alonso Granados, sin partido. Argumentaron que de esta forma evitarán más muertes por coronavirus.
Por su parte, la panista Mónica Rodríguez Della Vecchia acusó que el gobierno federal renuncia a vacunas para llevarlas a países pobres sin tomar en cuenta la necesidad que tienen los mexicanos e insistió en que se deben cancelar obras como la refinería en Dos Bocas, Tabasco, para destinar los recursos económicos a la atención de la pandemia.
En respuesta, el morenista Gabriel Biestro Medinilla reviró a la panista:“No sé de dónde sacan eso”, al explicar que Pfizer redujo el ritmo de entrega de dosis, tal como lo solicitó la ONU a las farmacéuticas para hacer una redistribución en los países.
Por otra parte, consideró que no se puede poner el acceso a la vacuna al libre mercado, para que la tenga sólo quien pueda comprarla. “¿Cómo se va a poner al libre mercado?, al que más tenga que se le entregue ¿y que se deje a quien no tenga a su suerte?”, cuestionó.
En este sentido, Biestro Medinilla exhortó a los diputados ser responsables con lo que dicen: “Elevemos el nivel. No se vale la mentira artera, burda y vulgar”. La priísta Rocío García Olmedo presentó un ocurso para exhortar al titular del Ejecutivo estatal y a la Secretaría de Salud que presenten el Plan Estatal de Vacunación COVID del Plan Nacional para dar seguimiento a la aplicación de las dosis.