Por: Guadalupe Juárez
Rafael Huerta tiene 12 años; hace cinco meses salió de su casa, iba a la tienda por una lata de frijoles que le pidió su padre en la colonia Balcones del Sur y no regresó.
Rafael vivía con su abuela Felisa Arroyo Juárez, pero por la pandemia y al no contar con los recursos suficientes para las clases en línea, su abuela y su mamá lo enviaron con su papá, en donde pasaría el confinamiento. Y ahora lo buscan.
De un par de personas que protestaban hace más de dos años, frente a la Fiscalía General del Estado (FGE), hoy son más de 100, un ciento de voces que reclaman al unísono que las autoridades busquen a sus hermanos, hijas, nietos y sobrinos que handesaparecido.
La fundadora del Colectivo La Voz de los Desaparecidos Puebla, María Luisa Núñez, reprochó la inacción de las autoridades y la inoperancia en la que está la Comisión Estatal de Búsqueda.
“Desde que desaparecieron nuestros familiares, hemoss vivido un largo camino de malos tratos, indolencia y desinterés, discúlpenos, no elegimos estar en pie de lucha, ni buscarles en cada rincón”, declaró.
Por último, exigieron a los legisladores aprobar la Ley en Materia de Desaparición de Personas en Puebla.