Fotos: Agencia Enfoque
Mientras el socavón en el municipio de Juan C. Bonilla desfonda la casa de la familia Hernández Xalamihua, las viviendas cercanas se cuartean en las convergencias de techos y muros y las paredes empiezan a perder la verticalidad.
De los pozos ya no sale agua; es ahora un lodo líquido con el que no puede hacerse ninguna actividad doméstica ni de trabajo. En el boquete, que los vecinos ven desmoronarse de las orillas para hacerse más grande, el ruido del agua que brota semeja el de olas del mar. Los habitantes de este paraje de Santa María Zacatepec temen y están en incertidumbre.