EL FONDO
Les sobran razones a los presidentes de juntas auxiliares del municipio de Puebla en reclamar que no hayan sido consultados sobre la determinación de ceder al Instituto Electoral del Estado la facultad para organizar los plebiscitos, toda vez que son parte involucrada, pero habría que decir también que, por encima del recelo, hay ahí otras preocupaciones.
Todos saben que en esas demarcaciones existen múltiples intereses en los que confluyen cacicazgos muy arraigados, que son los que en realidad tienen el control político y administrativo, de modo que no les convendría una elección apegada a la legalidad. El tema es amplio y dará de qué hablar en los días subsecuentes, ni duda cabe.
REZAGO
Ya que no ha dicho “esta boca es mía” para apoyar a los trabajadores poblanos que padecen por la contingencia sanitaria, tampoco se espera que el líder cetemista Leobardo Soto Martínez explique el retraso en la actualización de estatutos de los sindicatos agremiados a su organización.
Es obvio que la tiene difícil, pues dicho requisito prevé que las organizaciones sindicales deberán permitir el voto libre y secreto de los trabajadores, disponer de mecanismos de rendición de cuentas y promover la incorporación de mujeres en los órganos de dirección. A ver cuándo.
DIFÍCIL
Es un hecho que salvo Morena, los partidos políticos nacionales y estatales con registro local harán “oídos sordos” al exhorto que se aprobó en el Congreso del Estado, para que aporten 50 por ciento de sus prerrogativas para crear un fondo de apoyo a la contingencia sanitaria por COVID-19.
Una intentona similar ya fracasó a nivel federal con el argumento, que aquí se replicará, que la medida es ventajosa para los morenistas, que son los que tienen los recursos más altos al ser mayoría y que la razón de fondo es tratar de debilitar a las demás fuerzas políticas, en la víspera de un proceso electoral.
REFERENTE
Tras conocerse que buena parte de las empresas proveedoras de la Volkswagen han concluido su negociación salarial con acuerdos que oscilan entre 5 y 7 por ciento de incremento, es de suponerse que esos montos serán indicativos para el caso de los trabajadores de la planta automotriz alemana en Puebla.
Por lo pronto, continúan las pláticas entre el SITIAVW y la empresa, con el acuerdo de no hacer públicos los detalles de las negociaciones, toda vez que causó mucho ruido e incluso malestar que se supiera de la pretensión exagerada de un posible incremento de 12 por ciento, estimándose que no llegará ni a la mitad de esa cifra.