Andrea Macías Tarno
Los saludo con gusto, esperando se encuentren muy bien y listos para abrochar sus cinturones pues hemos llegado a la segunda temporada de eclipses en el eje Géminis/Sagitario de nuestra carta natal y tenemos que estar preparados para los movimientos que se darán con esta energía, recuerden que los eclipses son lunas llenas o lunas nuevas muy potentes, como si estuvieran bajo el efecto de esteroides.
Esta temporada inició el 5 de junio con un eclipse lunar en Sagitario y cierra el año con un eclipse lunar en Géminis la madrugada del 30 de noviembre y un eclipse solar que será en Sagitario el 14 diciembre. Mercurio, planeta clave en estos eclipses, pasa sus últimos días en Escorpio y tiene la cita (sextil) que faltaba, ahora se encuentra con Saturno en Capricornio, el gran maestro para terminar de acordar y estar listos para aterrizar y asumir un compromiso o responsabilidad relacionado con aquello que nos apasiona y nos mueve. Terminando esta cita, Mercurio ingresa a Sagitario el 1 de diciembre para quedarse hasta el 19 y a pesar de que no es uno de los territorios en donde mejor se siente, jugará un papel muy importante en los eclipses.
Ahora veamos de qué trata la energía de este eclipse de Nodo Norte/Lunar, pero antes recordemos lo siguiente:
1. El par de signos donde se encuentran los Nodos lunares (norte y sur) será en donde sucedan los eclipses. En este caso el Nodo Norte está en Géminis y el Nodo Sur en Sagitario (Mayo 2020 hasta Enero 2022).
2. La última vez que tuvimos a los nodos lunares como están actualmente, fue entre 2001 y 2003, específicamente en mayo de 2003. Recordemos qué sucedía en nuestra vida en aquél entonces.
3. Los eclipses pueden ser Lunares (luna llena)/Solares (luna nueva) y de Nodo Norte (Futuro, hacia donde debemos ir)/Nodo Sur (Pasado, lo que tenemos que dejar ir).
4. Este eclipse es Lunar y de Nodo Norte, así que lo que sea que tengamos que soltar es necesario para alinearnos con el propósito de nuestra alma. Se relaciona con el futuro, con algo nuevo que viene y cambia la trayectoria de nuestro destino
5. El efecto de los eclipses tiene una duración de seis meses aproximadamente.
Este eclipse lunar es una Luna llena, pues el Sol (Sagitario) forma una oposición con la Luna (Géminis), lo cual marca el final de algo, el cierre, así como la luna está llena, estamos nosotros y necesitamos vaciarnos para tener espacio para lo nuevo.
Nos podemos sentir desbordados emocionalmente e inestables, no es recomendable tomar decisiones importantes en este periodo sino fluir y dejar que la energía del eclipse nos revele su propósito, pues seguramente nos pondrá en donde tenemos que estar, la Luna llena iluminará algo que no habíamos visto, nos dará claridad, grandes revelaciones.
El eje Géminis/Sagitario se relaciona con el conocimiento vs nuestras creencias, así que estaremos revisando qué información ya no sirve, qué ventanas tenemos que cerrar y cómo integraremos la dualidad de Géminis y la sensación de estar divididos. Mercurio en Escorpio, regente de este eclipse forma un sextil (oportunidad) con Saturno en Capricornio el mismo día, potenciando la energía del eclipse, conversaciones con personas importantes, poderosas y clave para nuestros proyectos y decisiones, estructura fuerte y sólida para aterrizarlos.
Un día después del eclipse, el 1 de diciembre, Mercurio ingresa a Sagitario para quedarse hasta el 19, no es uno de los signos en donde mejor se siente pero si será el momento propicio para revisar nuestras creencias y su origen pues al encontrarse en Nodo Sur en Sagitario y el eclipse solar del día 14 en este signo, nos estaremos preparando para cuestionar y actualizar aquello en lo que creemos, pero de eso, les hablaré más adelante.
¡Un abrazo y hasta la próxima!