Un estudio realizado en Dublín, Irlanda, reveló que los bebés que son alimentados con biberón ingieren una gran de microplásticos.
La investigación publicada en la revista Nature Food resalta que los biberones liberan altos niveles de microplásticos durante la preparación de la fórmula, al igual que cuando se esterilizar con agua caliente, debido al calor.
Este análisis fue hecho por expertos del Centro de Investigación de Materiales Avanzados e Investigación en Bioingeniería del SFI (Amber), TrinityHaus y las escuelas de Ingeniería y Química del Trinity College de Dublín.
Al respecto, los investigadores desarrollaron un conjunto de recomendaciones para la preparación de fórmulas infantiles cuando se usan biberones de plástico para minimizar en medida de lo posible la liberación de microplásticos:
- Poner agua esterilizada a hervir en una olla o hervidor que no sea de plástico
- Enjuagar la botella con agua esterilizada a temperatura ambiente al menos tres veces después de que haya puesto en el agua caliente
- Preparar el biberón calentado agua con una tetera u olla que no sea de plástico
- Mezclar la fórmula igualmente en un recipiente que no sea de plástico a una temperatura de al menos 70 °C
- Dejar enfriar a temperatura ambiente y transferir la fórmula preparada al biberón
Además de esto, los expertos recalcaron la importancia de usar una mamila que sea de alta calidad y está avalada por las autoridades sanitarias.
Finalmente, los investigadores destacaron que, de seguir las pautas actuales para la esterilización de biberones y la preparación de fórmulas de alimentación, el nivel de exposición diario promedio para los bebés es superior a un millón de microplásticos.
Con información de El Comercio, Milenio y La Vanguardia
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