Poblano de nacimiento y lobo de corazón, futbolista profesional en Marea Azul FC. Esta es la biografía de César Cercado en sus redes sociales, un jugador nacido en la Angelópolis que supo tocar el cielo en el fútbol mexicano y que ahora sigue viviendo la pasión por la pelota por el simple hecho de disfrutar del juego y ya sin los reflectores que tuvo en algún momento.
En 2017 cumplió el sueño de niño al anotar el gol en la final del Ascenso MX, para que Lobos BUAP llegara al duelo para subir al máximo circuito, pero ahora con 33 años su vida es otra, juega en el equipo Marea Azul de Martínez de la Torre, en Veracruz, dentro de la llamada Liga Profesional de Futbol.
El defensor pasó casi toda su vida futbolística en Lobos BUAP, club al que llegó en 2004, cuando se integró a la filial de Tercera División, hasta 2019 cuando ya no tuvo cabida en el equipo que aún jugaba en Primera División y se marchó a Alebrijes de Oaxaca, del ahora extinto Ascenso MX.
Con intervalos en Puebla en 2011 y Cruz Azul en 2012, Cercado estuvo en todo el crecimiento y desarrollo de los lobunos, jugando la final por el ascenso que perdieron ante León en 2014, y luego siendo fundamental en 2017 cuando la institución logró la hazaña de subir al máximo circuito.
FUE MUY DURA LA DESAPARICIÓN DE LOBOS
“Me enteré por los medios, al final a uno nunca le dijeron nada, no sabíamos cómo estaba la situación dentro del club, sólo lo que iba saliendo en la prensa. Fue un golpe muy duro para mí en lo profesional después de estar tanto tiempo y poder probar Primera División, de repente desaparecerlo fue muy duro. Lobos significó todo para mi deportivamente hablando porque pasé la mayor parte de mi vida futbolística ahí, fueron los que me abrieron las puertas en el futbol profesional así que es parte de mi vida este club”, fueron las palabras de César Cercado, jugador que estuvo desde los 15 años en la institución.
El apodado Loco llegó en 2004 a la jauría, cuando todavía era un equipo nómada que no contaba con un estadio propio y jugó en la cancha de la preparatoria Benito Juárez, en el estadio Cuauhtémoc e incluso en la obra negra del Olímpico Universitario de la BUAP, que fue culminado hasta 2012.
Debutó con 18 años en 2007 y desde entonces se volvió un incondicional del equipo jugando la final por el ascenso en 2012 en la que cayeron ante el León de Gustavo Matosas que dos años después fue bicampeón de la Liga MX. El punto más alto de su carrera fue en el 2017 cuando se erigió como pieza clave en la escuadra que subió al máximo circuito dirigidos por Rafael Puente del Río.
“Al equipo lo vi crecer desde que jugaba en la Benito, cuando el estadio de CU estaba en obra negra, fui viendo el crecimiento, cuando empezaron a remodelar, entonces la verdad me ilusionaba mucho poder jugar en Primera División con el equipo, por todo lo que viví, lo malo y lo bueno, la final de 2012 que nos quedamos a nada de ascender, pero seguimos trabajando hasta que se nos dio en 2017, que fue algo por lo que trabajé tanto y que se merecía el club después de pelearlo tantos años y nunca bajar los brazos, siempre estar ahí”, comentó.
Cercado puede presumir que es de los pocos futbolistas poblanos que mantuvieron con consistencia en el futbol mexicano durante los últimos años, ya que después de la partida de Lobos, recayó en Alebrijes de Oaxaca donde se coronó campeón en el Apertura 2019 en el Ascenso MX, aunque quedó imposibilitado de volver a la Liga MX por la desaparición de la categoría de plata.
Loco iba a regresar al conjunto que lo vio debutar como profesional en 2004 y donde permaneció prácticamente toda su carrera hasta 2019 tras la primera desaparición por la venta de Mario Mendívil a Juárez, pero después de no poderse consolidar la vuelta de Lobos en 2020 para la Liga de Balompié, optó por la talacha.
Apoyado por el prestigio que se ganó a partir de ese ascenso, recibió la invitación para jugar en diversas ligas en la Unión Americana y también en México, pues este es un hecho que cada vez es más común, después de su etapa como profesional en México, varios jugadores han encontrado en el amateurismo su forma de continuar en contacto con el balón y sobre todo seguir recibiendo un pago por su actividad deportiva.
Ahora participa con el equipo Marea Azul, en Veracruz, donde sigue dando cátedra de sus cualidades en la defensa y demostrando que el futbolista poblano tiene calidad y jerarquía para destacar en cualquier ámbito.