¿Qué es la riqueza? Nada, si no se gasta; nada, si se malgasta; y de nada vale estar vivo si hay que trabajar.
André Breton
PONGA MUCHA ATENCIÓN
1.- El relato que sigue, son de acontecimientos que ha vivido la humanidad, y que cada día aparecen datos que pueden repetirse:
¿Cuántos millones quieres, hijo?
Todos los historiadores coinciden en señalar que las condiciones de paz de la Primera Guerra Mundial son la causa de la Segunda Guerra Mundial. En la obligación de pagar la enorme deuda de guerra impuesta por los aliados a Alemania, y sin el respaldo de oro u otras reservas, la República de Weimar entró en una espiral de inflación tan alta que en un solo año, 1923, el marco pasó de 17 mil 972 marcos por dólar a 4,200,000,000,000 de marcos por dólar. En 1920, el valor más alto de un sello era de 4 marcos, en 1923 subió a 50 mil millones de marcos. Lógicamente, los precios experimentaron un incremento brutal, y fue necesario pagar a la clase media sus sueldos dos veces al día con un receso de media hora para poder gastarlo inmediatamente. Esperar dos horas podía significar comprar sólo la mitad de comida o pagar un precio muy superior.
Aquel año, los niños podían jugar a levantar torres con enormes fajos de billetes, y las familias alimentar sus estufas con miles de billetes, cuyo valor era inferior al papel en el que estaban impresos. Fue en este contexto que Adolf Hitler (1889-1945) llegó al poder y se ganó la admiración del pueblo alemán sacando a Alemania del marasmo y perfilándola como una potencia económica. Para ello, organizó un plan de recuperación basado en la generación de empleo mediante obras públicas, industria armamentística y otras medidas cuyo oscuro trasfondo no importaba indagar… ¿Era relevante acaso que desaparecieran los derechos civiles de los judíos, primero, y después, sus propiedades e incluso su existencia, si su dinero aparecía transformado en mejor calidad de vida para los alemanes? El tema anterior se refiere a lo que conocemos como “moneda”, palabra de origen latino moneta, sobrenombre que los romanos le daban a la diosa Juno, ya que junto a su templo se instaló una fábrica de moneda.
La moneda es un signo que representa el precio de las cosas para efectuar cambios. Hay monedas fuertes y débiles sujetos a criterios internacionales.
Son muchos factores los que marcan esos ritmos de fortaleza. En nuestro país, a pesar de todo y de virus tenemos una moneda fuerte. Eso nos lleva de todas formas a actuar con prudencia, madre de la seguridad.
MUY INTERESANTE
2. El tiempo dijo que no era un loco y tampoco un mendigo.
Aquel estudiante cursó arquitectura en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona, en la que se graduó en 1878. Su expediente académico fue regular e incluso recogió alguna que otra calabaza. Elies Rogent i Amat (1821-1897), director de la Escuela de Arquitectura, declaró en el momento de otorgarle el título: “Hemos dado el título a un loco o a un genio, el tiempo lo dirá”.
La respuesta del tiempo no fue una, sino varias. En concreto, la UNESCO ha reconocido siete de sus obras como Patrimonio de la Humanidad: La Casa Vicens, La Fachada de la Natividad y La Cripta del Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, El Palacio Güell, El Parque Güell, La Casa Batlló, La Casa Milá y La Cripta de La Colonia Güell.
Aquel estudiante también destacó como interiorista, encargándose personalmente de la decoración de la mayoría de sus edificios, desde el diseño del mobiliario hasta los detalles más nimios de la acústica, la iluminación y el color. Es de remarcar que efectuó estudios de ergonomía para adaptar su mobiliario a la anatomía humana de la forma más óptima posible y todo ello dotando al conjunto de las formas más naturales y caprichosas. Por esta razón es una auténtica lástima que algunos de esos interiores hayan desaparecido.
El 7 de junio de 1926, aquel estudiante, ya mayor y un católico convencido, se dirigía a la Iglesia de San Felipe Neri, en el casco antiguo de Barcelona, para rezar y entrevistarse con su confesor, como era habitual en él.
Durante el trayecto fue atropellado por un tranvía, que lo dejó sin sentido. Al ir indocumentado y presentar un aspecto descuidado, con ropas sencillas y gastadas, se le tomó por un mendigo y no fue socorrido de inmediato.
Al día siguiente, lo reconoció un capellán de la Sagrada Familia, en el hospital donde había sido conducido, pero ya era tarde para hacer algo por él. Dos días después de aquel accidente, moría, a los 74 años de edad.
El funeral de Antoni Gaudí i Cornet (1852-1926), cinco días después del atropello, fue multitudinario.
Antoni Gaudi fue un arquitecto catalán, máximo representante del modernismo catalán, falleció el 10 de junio de 1926 en el antiguo Hospital de Santa Cruz de Barcelona (España); el sepelio fue en la Basílica de la Sagrada Familia de Barcelona.
El tiempo le contestó al director de la Escuela de Arquitectura: Gaudí, fue un genio, ahí están sus obras para confirmarlo.
Siempre será interesante hablar de Gaudí. Lo narrado en los puntos 1 y 2 están contenidos en el libro La Historia del Mundo, de Fernando García Blázquez, Editorial Planeta, España.