El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, se reunió con los familiares de Santiago, el niño de 12 años que murió aplastado en el Centro Histórico, cuando un árbol cayó sobre la caseta de periódicos propiedad de su madre, el 29 de agosto.
Tras la misa dominical, se reunió con Teresa Trejo, a quien dio sus condolencias por la trágica pérdida de su hijo, además de confiar en que se recuperará de las lesiones que tuvo en el accidente, provocado por la fuerte lluvia de ese día.
Durante su homilía, Sánchez Espinosa señaló: “Hace unos días sucedió una desgracia en el Centro Histórico, la caída de un árbol y la muerte de un niño Santiago”.
“Lo recuerdo con mucho cariño en oración y la fe nos dice que por su edad e inocencia está con Dios. Pedimos por él y por su familia, me uno a la pena que los embarga y pido que tengan pronta paz y resignación”, dijo.
Más adelante, indicó que la sociedad requiere ser realista, constante y audaz, para considerar riesgos que se afrontan.
Ello luego de pedir la colaboración de todos los sectores de la sociedad para contrarrestar la violencia del país, al tiempo de hacer oraciones por Rosario Lilián Rodríguez Barraza, activista que fue encontrada sin vida en Sinaloa y quien buscaba a su hijo desaparecido.
Dijo que se debe reflexionar en los valores católicos, en sus principios y mandamientos a cumplir, pues ayudan a orientan a la grey en el amor al prójimo y a Dios.
Víctor Sánchez también pidió oraciones por los integrantes de la Catequesis Familiar, que inicia sus cursos 2022-
2023.