La secretaria del Medio Ambiente en Puebla, Beatriz Manrique confirmó que hay dos oquedades más en la zona del socavón de Juan C. Bonilla, por lo que se ha recomendado ampliar el perímetro de resguardo hasta 2.5 hectáreas.
Indicó que se ubican a poco más de 50 metros de profundidad y las dimensiones son entre 5 y 10 metros.
Uno de ellos se ubica en el Noroeste del socavón original y otro más al Suroeste, el cual está fuera del perímetro del fenómeno inicial.
Señaló que estas oquedades son parte de 14 que fueron detectadas en los estudios de la zona que se han realizado, sólo que los demás son menores al momento.
Manrique Guevara dijo que en la segunda fase de estudios se concretó que la formación del socavón se debió a diversos factores naturales y que se acrecentó por la extracción de agua, principalmente en los últimos 15 años.
Indicó que el socavón es un acuífero sano y se recomienda colocar señalética para que las personas no se acerquen, pues el terreno es inestable; asimismo, se mantiene con agua permanentemente ya que al colapsarse las paredes de tierra, el acuífero quedó al descubierto.
Por su parte, la secretaria de Desarrollo Rural, Ana Laura Altamirano Pérez comentó que se han pagado las indemnizaciones corrspondientes a los propietarios de cosechas dañadas por el socavón.
Asimismo, indicó que al llevarse a cabo el acordonamiento, salieron los pagos de personas que también vieron perdidos sus predios pero algunos de ellos no han acudido porque el comisariado ejidal les dice que no acepten el pago.
Sobre la familia Sánchez, propietaria de la casa que se tragó el socavón, están en espera de las escrituras de un terreno que adquirió el gobierno estatal por 182 mil pesos, para que se inicie la construcción de su nuevo hogar.