Diana López Silva
Se estima que, en Puebla, al año son cometidos más de 300 fraudes inmobiliarios, de los cuales la mayoría no son denunciados.
Generalmente son cometidos por particulares que no cuentan con licencia de profesional inmobiliario o por empresas que trabajan en la ilegalidad.
Así lo reveló Alejandro Muñoz Muratalla, presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) en Puebla, quien gestiona actualmente la aprobación de una ley inmobiliaria que regule este sector y proteja a compradores e inquilinos en la entidad.
En entrevista para Crónica de Puebla, destacó que el sector inmobiliario representa 4.1% del Producto Interno Bruto estatal; es decir, 85 mil 700 millones de pesos que no están regulados.
Señaló que es difícil cuantificar el número de casos de fraudes inmobiliarios en Puebla, porque más de 80 por ciento no son denunciados.
Como presidente de la AMPI en Puebla, mencionó que los ciudadanos piden apoyo cuando ya han sido víctimas de fraude.
Aunque se les brinda asesoría, es difícil encontrar una solución cuando se trata de empresas que no pertenecen a la asociación y que operan en la ilegalidad.
Detalló que los casos más frecuentes de fraude ocurren en las rentas, principalmente porque Puebla es una “ciudad universitaria” a la que llegan estudiantes foráneos buscando un alquiler.
“Rentan, dan un anticipo y, cuando ven, la inmobiliaria ya desapareció”, dijo.
Agregó que estos son los casos más críticos, por número, pero los de mayor monto se dan en la compra de casa- habitación, porque se paga un anticipo mucho mayor y las inmobiliarias desaparecen.
“De los casos que atendemos, 70% es de fraudes de renta y el otro 30% de compraventa o administración”, señaló.
CIFRA NEGRA
Aclaró que estas cifras corresponden a los casos de los que se entera la asociación, pero afirmó que hay una cifra negra alarmante de casos no denunciados.
Calculó que, de un caso denunciado, 20 no son reportados.
“Hablando que si al año nos enteramos de aproximadamente 20 casos, hay más de 300 que no se denuncian”, precisó.
Con información de la AMPI, mencionó que no hay una zona más problemática, pero la renta de vivienda para estudiantes se concentra alrededor de las universidades, mientras que la compraventa de casas suele ocurrir donde hay más proyectos de desarrollo de vivienda.
Apuntó que actualmente hay 155 proyectos en proceso, la mayoría en la zona de Lomas de Angelópolis.
“Más de 22% de desarrollo de vivienda se concentra en Lomas de Angelópolis y, por lo tanto, es la zona más problemática, por cantidad”, destacó.
NUEVA LEY
La Asociación de Inmobiliarios entregó en febrero pasado al Congreso de Puebla una iniciativa para su análisis y aprobación.
Muñóz Muratalla explicó que esta ley pretende regular el sector inmobiliario para evitar fraudes y proliferación de inmobiliarios no certificados, con el propósito de dar certeza jurídica a las operaciones inmobiliarias en el estado.
Detalló que lo que se busca es establecer los requisitos necesarios para tener esa mediación en la adquisición de bienes inmuebles, un padrón de inmobiliarios bien ubicados y que estén registrados ante el Sistema de Administración Tributaria (SAT), “porque hay muchos que no pagan impuestos”.
Se busca, dijo, que el cliente sepa con quién está haciendo la operación y que los inmobiliarios se adapten a un código de ética, a un reglamento y a una licencia. “Que si así no lo hicieran, se les cancele su licencia, para que no puedan hacer operaciones”, sentenció.
Este padrón estaría a cargo de la Secretaría de Economía, para ser consultado por quienes buscan comprar o rentar en Puebla.
La ley aplicaría para profesionales inmobiliarios y para los ciudadanos que incursionen en el ramo, “porque muchas personas que quieren vender su casa la ofrecen, la venden y ya se sienten inmobiliarios, pero no se han capacitado; no saben de derecho fiscal, de comercialización, de Infonavit y entonces hay que certificarse”.
EMPRESAS FANTASMA
Muñóz Muratalla señaló que el mayor número de problemas se relaciona con particulares que quieren rentar o vender sus propiedades sin tener certificación.
“Un inmobiliario certificado lo primero que hace es verificar si el inmueble está en perfectas condiciones, si legalmente es posible, si está libre de gravamen y cosas que darán certeza jurídica al finalizar la operación”, dijo.
También señaló que tanto las inmobiliarias que tengan su domicilio en Puebla como las que tengan operaciones fuera de Puebla tendrán la obligación de cumplir con esta ley y registrarse en el padrón inmobiliario.
“Con eso tendrás la certeza de que son inmobiliarios que trabajan en otros estados, pero van a estar empadronados, revisados y certificados”, apuntó.
Mientras la iniciativa es analizada en el Congreso del estado de Puebla, Alejandro Muñóz Muratalla recomendó a quienes buscan comprar o rentar en Puebla que pregunten si el inmobiliario con el que están tratando pertenece a los más de cien afiliados a la AMPI, para dar mayor certeza a su operación de compraventa o alquiler.