La fuente de San Miguel, ubicada en el zócalo de Puebla, fue uno de los monumentos más dañados tras las marchas por el #8M.
Varias de las piezas que la conforman, así como lajas tienen daños tras golpes con martillos, por lo que tendrán que ser reparadas o en su caso sustituidas, siendo algunas de estas partes, de valor por su antigüedad.
Trabajadores del ayuntamiento de Puebla han comenzado con los trabajos de rehabilitación para quitar las pintas que también se efectuaron en la fuente.