En enero del año 1649, Juan de Palafox y Mendoza recibió la orden de regresar a España y dejar la diócesis de Puebla, así que la construcción de la Catedral Angelopolitana aceleró y un día igual a hoy se consagró el inmueble.
A las seis de la mañana comenzó el programa que un mes antes el obispo había diseñado y difundido.
Las actividades incluyeron un exorcismo en la parte posterior del sitio y los festejos se prolongaron durante tres días.