El cerro de Amalucan alberga desde hace más de cuatro siglos la hacienda que, gracias a sus cosechas, hizo posible la construcción del Colegio del Espíritu Santo, en el cual tiene sus raíces la BUAP.
Tras años de provecho, sobrevino la quiebra, y fue hasta inicios de 1900 cuando Hugo Petersen Colombres se hizo cargo de la finca y el negocio volvió a dar frutos.
Foto: Cortesía Hacienda San Juan Bautista Amalucan