Jesús Peña
La Arquidiócesis de Puebla fijó una posición frente a la tradición conocida como “descenso del ángel”, en el municipio mixteco de Huatlatlauca, y que cada año pone en riesgo la vida de un niño: suspender de inmediato esta práctica.
“La Arquidiócesis pide que, en cualquier otra comunidad de su jurisdicción, se eviten totalmente prácticas semejantes, pues es prioridad salvaguardar la vida, la salud y la integridad de las personas, por encima de
costumbres, tradiciones o iniciativas novedosas o vistosas”, cita el comunicado oficial.
Este acto es parte de las festividades del Día de Reyes, fiesta patronal del municipio.
Desde hace décadas, la comunidad elige una niña o un niño que será vestido con túnica, aureola y alas. Desde lo alto del único campanario del templo parroquial –del siglo XVI–, a unos 14 metros del suelo, el “ángel” debe llevar las manos hacia arriba mientras un hombre lo baja soltando una cuerda desde la torre del inmueble.
Para asegurar la trayectoria, se tensan dos cables de acero en forma paralela, que pasan a través de un arnés que los mayordomos de la cabecera municipal han ideado para colocar en la cintura de la niña o el niño elegido.
En la página de Facebook de Huatlatlauca está posteado un video, subido el 8 de enero (dos días después del hecho), y cuatro fotografías sobre “la bajada” de este año.
En la grabación, se ve el menor de edad parado en la parte exterior del campanario, luego cómo se le coloca el arnés y lo hacen descender.
Quien videograbó, identificado como Gabriel Santos, narra que “el ángel” lleva una paleta en la boca “pa’ los nervios”.
El video, de 2:30 minutos, concluye cuando un adulto recibe al menor sobre un templete, colocado bajo manteado.
El pasado viernes, el párroco Jovany Monroy presidió los festejos y ha señalado que el descenso es organizado y ejecutado por el Comité de Fiestas Patronales de la comunidad, que él esta en desacuerdo porque puede producirse un accidente.
La Arquidiócesis de Puebla ha solicitado al párroco que, “en acuerdo con Protección Civil del municipio, sostenga una reunión con el Comité Organizador y se pida que, en adelante, se lleve a cabo esta tradición utilizando un ángel de utilería”.