Los padres de Zyanya Estefanía Figueroa Becerril, una doctora que en 2018 fue hallada muerta en su departamento, solicitaron en una audiencia que el caso se investigue como feminicidio y no como suicidio.
La familia argumentó que los peritos que han contratado cuentan con evidencias que tiran la versión del suicidio como se ha empeñado en catalogar la Fiscalía General del Estado (FGE) a la muerte de la joven de 26 años de edad.
Afuera de la audiencia, mostrando fotografías de Zyanya, se manifestaron integrantes del Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidio, quienes exigieron a las autoridades investigar el caso con perspectiva de género.
Fue el 6 de agosto de 2018, cuando encontraron el cuerpo de la joven que se desempeñaba como practicante en el Hospital del Niño Poblano, donde presuntamente sufrió de acoso laboral.
El dictamen oficial señaló que se trató de un suicidio, ya que también hallaron una supuesta carta póstuma, sin embargo, tanto los amigos y familia de Zyanya, rechazaron esta versión ya que la letra no correspondía a la de ella.