Por: Mariana Flores
Santiago Albino Hernández, padre de Lázaro –el bebé dado por muerto seis horas en el hospital de La Margarita del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)– presentó una queja ante la Comisión de Derechos Humanos (CDH) Puebla contra la institución de salud por considerar que se violentaron sus derechos, cuando le dijeron que su hijo no había sobrevivido.
Con la queja, Santiago busca que se mejore la atención médica que reciben su esposa y su hijo, luego que el miércoles 21 de octubre, descubrió que su hijo estaba vivo en el área mortuoria del hospital, aunque los médicos certificaron que había fallecido. Después de la CDH, busca presentar otra queja en la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para que investigue al personal médico que atendió a recién nacido y madre de familia.
“El niño sigue internado, no lo han dado de alta en ninguna ocasión. A mi esposa la habían dado de alta, pero se puso mal al siguiente día y otra vez la tuve que regresar a que la atendieran”agregó. Con recursos limitados de por sí, ahora debe pagar traslados todos los días de Amozoc a Puebla para estar al tanto del estado de salud del bebé, quien sigue grave, y cumplir su jornada laboral de obrero. Su sueldo es el único sustento para la familia.
El bebé nació a las 23 de 40 semanas de gestación, circunstancia que lo hace frágil y le requiere ayuda especial. Le recomiendan cambiar de hospital para obtener tratamiento adecuado para su esposa, pero le es imposible hacerlo a un sitio privado; exige que los médicos le den la atención adecuada como derechohabiente. Lázaro en la incubadora se encuentra estable. pero con riesgo de muerte, añadió.