Mariana Flores y Karla Cejudo
Personal médico de diversos institutos de salud en Puebla se manifestó para exigir un alto a la criminalización y violencia que considera sufre el gremio, después de los últimos casos de presuntas negligencias médicas.
Desde el Paseo Bravo, cerca de 50 manifestantes, entre médicos, enfermeras y personal administrativo, avanzaron sobre la avenida Reforma para llegar al zócalo de la ciudad, donde colocaron mantas y pancartas con sus demandas.
“Criminalizar el trabajo del personal de la salud es lamentable e inadmisible”, se leía en algunas pancartas.
Entre los inconformes se encontraban empleados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado de Puebla (ISSSTEP) y de los hospitales del gobierno estatal.
Angélica, como doctora, resaltó que a pesar de la falta de insumos y recursos, el personal de la salud da atención médica en medida de lo posible.
“Se nos acusa de negligencia médica, pero no tenemos el material ni los equipos para hacer más de lo que ya hacemos”, puntualizó.
Los inconformes también se refirieron al caso del Hospital de San Alejandro –afectado en el sismo de 2017–, pues sigue sin construirse el nuevo que lo sustituirá, por lo que en otros hospitales –como el de la Margarita– ya no tienen espacio para dar una atención digna.
“Nos están tachando de criminales, cuando cada día somos nosotros los que nos exponemos y a nuestras mismas familias por tratar de salvar vidas de personas que, muchas veces, no se cuidaron”, sentenció.
De enero a octubre de 2020, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) acumuló 56 quejas contra el IMSS, por violentar garantías individuales, 24% más comparado con 2019.
Las principales quejas consistieron en acusarlos de obstaculizar o negar las prestaciones de seguridad social a las que los derechohabientes tienen acceso, por omitir el suministro de medicamentos o negarse a proporcionar atención médica, “prestar indebidamente” el servicio, negligencia médica y por trámites médicos deficientes.
Así como faltar a la legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficacia en el desempeño de las funciones, empleos, cargos o comisiones, además de revelar datos personales.