El mandatario estatal, Miguel Barbosa Huerta señaló que aun cuando la Federación pone a Puebla como entidad en color epidemiológico Naranja, se mantendrán las restricciones de color rojo debido a que se mantiene un nivel alto de contagios y deceso por COVID-19.
Tan sólo este fin de semana hubo 814 contagios y 118 muertos más.
«A pesar de las restricciones, los números siguen elevados, por eso lo publicado en la Federación, del color naranja, no lo asumimos como tal, seguimos con restricciones que incluso son generosas, no vamos a subirlas pero no vamos tampoco a bajarlas, hay una enorme preocupación por el número de decesos».
Refirió que las defunciones se relacionan al tiempo de llegada de pacientes, quienes acuden ya a los hospitales en situaciones graves y llegan a prácticamente a morirse.
«Les pido que lleguen pronto a los hospitales, que no duden de que se les va a curar porque permanecer en sus casas con médicos privados, que podrán hacerlo bien, pero que el organismo del paciente y las comorbilidades requieren de respuesta a medicamentos y tener ventilación asistida es fundamental… muchos no van por miedo al ambiente que dicen hay en los nosocomios… el ambiente de los contagiados deben estar en el hospital no en sus casas, el rechazo a ser intubado es generalizado, pocos es de manera voluntaria», agregó el gobernador.
Concluyó que el momento es crítico en Puebla, «debemos cuidarnos, así como a los de nuestro alrededor en la sociedad, que los fines de semana no sean de relajamiento, muchas personas lo hacen cuando no hay normalidad, «unámonos y saldremos más rápido de la crisis», concluyó.