No son juguetes.
Las armas largas que se exhibieron en Arizona, primero, y luego en escenas que se viralizaron en segundos, son reales, de alto poder.
Para defender el voto en favor de Trump, anunciaron. En Nueva York, agrupados bajo el grito Black Lives Matter, cientos salieron a manifestarse frente a la policía. Se les plantaron. Un músico, con su trompeta, con blues.
Al sur del mapa, en Cancún, el escalón de casi dos metros de alto constituye la evidencia de que los aguacerazos del mal tiempo le dan el zarpazo a la playa.