Este domingo se llevó a cabo en todo el mundo el acto religioso conocido como Domingo de Ramos, la festividad que marca el comienzo oficial de Semana Santa para todos los creyentes del cristianismo, y que en esta ocasión estuvo marcada por la pandemia de COVID-19.
Debido a lo anterior, las iglesias tuvieron que celebrar sin fieles, y afectó de manera considerable a todos los artesanos de palma que año con año vendían sus artesanías para los feligreses, lo que se convirtió en un día sin ramos.
Uno de los sectores afectados por el virus que azota a todo el país es el de los artesanos, quienes acudían a distintas iglesias para vender las artesanías de palma que son usadas para celebrar el Domingo de Ramos por todos los fieles de la Iglesia Católica; sin embargo, este año no se logró el cometido, pues las conglomeraciones están prohibidas por el tema del contagio de COVID-19.
Dorotea Blanco Aguilar, quien se dedica a la actividad del tejido de la palma, dice que la mayoría de los artesanos comienza a trabajar desde el mes de febrero, cuando inicia todo con el Miércoles de Ceniza, y ahora se quedó sin la inversión, pues aunque han salido a las calles para vender algo es muy poco lo que se ha logrado juntar.
Al respecto, la mujer originaria de San Miguel, de la Zona Mixteca, confesó lo siguiente:
“Diez años dedicándome a esta actividad de hacer las artesanías y nunca había visto esto que no se hiciera el domingo de ramos, este año nos tocó perder y será un día triste un domingo de ramos inolvidable”.
De acuerdo con lo referido por el diario El Sol de Puebla, en esta temporada los artesanos venden entre 800 pesos y 5 mil pesos, dependiendo de la demanda y la competencia, pero este año la cifra se ha reducido de manera dramática, lo que es un reflejo de las condiciones en que muchas personas están afrontando la pandemia.
Por su parte, el papa Francisco, quien celebró el oficio ante una plaza de San Pedro sin personas, emitió un mensaje en el que aseguró que nadie estará solo en estos tiempos de crisis:
“Hoy, en el drama de la pandemia, ante tantas certezas que se desmoronan y con el sentimiento de abandono que nos oprime el corazón, Jesús nos dice a cada uno: ‘Ánimo, abre el corazón a mi amor. Sentirás el consuelo de Dios, que te sostiene’”.
Con información de El Sol de Puebla, El Financiero, YouTube y Crónica Puebla
Portada: Pxhere
Fotos: Twitter @OscarMa12448917, @PaulRincon10, @TheoGelves y @MarioChaconV