En un mismo día, las diferencias van de la tierra al cielo: mientras la tripulación estadounidense prepara la nueva era de los viajes espaciales, en Florida, en América Latina una etnia vive en cautiverio y con guardia militar: los shipibos, que estaban en la región amazónica y llegaron a la ciudad de Lima, se encuentran cercados porque tres cuartas partes de las 250 familias vecinas están contagiadas de coronavirus.
Los astronautas prueban el equipo con que dejarán el planeta dentro de pocos días mientras los hijos del Amazonas no pueden salir de su barrio porque de un lado está el cerco militarizado y, del otro, el más contaminado de los ríos.