Los 25 mayores proyectos gubernamentales tienen una característica en común: no hay niños como beneficiarios directos de la acción oficial; mientras desaparecen redes de estancias infantiles y organismos públicos de atención al menos ven mermadas sus partidas, expone la Red por los Derechos de la Infancia.
“Para el gobierno federal en sus proyectos de interés no figuran los derechos ni las necesidades de los niños, niñas y adolescentes. Es un sector invisible de la sociedad a los ojos de las autoridades y al que se ha eliminado del interés presupuestal, por lo que los derechos y necesidades de la niñez no son prioridad de este gobierno”, dijo en entrevista con Crónica, Juan Martín Pérez García, director Ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).
“El gobierno federal estableció como su legado 25 proyectos de interés prioritario y en ninguno los incluye (a los menores). Es decir, dejaron fuera de su interés (presupuestal) a uno de cada 3 mexicanos y mexicanas, porque no votan, y por eso no son de interés para el gobierno. Esta administración todo lo hace en función de lo electoral y como los niños y niñas no son parte de su proyecto, pues simplemente están fuera de las narrativas y de los planes presupuestales, y esto no solo incluye a la federación, sino a los gobiernos estatales, que también han inclinado sus partidas presupuestales para sus partidos y se olvidan de los menores”, acusó el titular de la REDIM, una red conformada por 75 organizaciones de la sociedad civil.
En el mismo tenor, Juan Martín Pérez García destacó que “otro elemento (que ha marcado su distancia de atención con los niños, niñas y adolescentes) son las dependencias e instituciones encargadas de velar por ellos, como el DIF, que ha sufrido recortes en sus presupuestos en estos dos años de gobierno, por más del 34%, además de ajustar los programas de atención a la niñez, por lo que simplemente (con lo aportado por la federación) no les alcanza”.
Juan Martín Pérez García destacó que las consecuencias que traerá consigo este abandono a la niñez ya están presentes, y asegura que “frente a este panorama se estima un retroceso social con afectación directa en niños, niñas y adolescentes, en más de 10 años, ante la negativa del gobierno federal por apoyar y respetar los derechos de la niñez en el contexto de la pandemia. Y es que antes de que apareciera la COVID-19, la federación ya había quitado apoyos que había para programas infantiles, como las estancias infantiles, eliminó los programas escolares de tiempo completo y otros de ayuda para los adolescentes, a lo que se suma el desconocimiento y desinterés por tener una estrategia para prevenir el trabajo infantil, auxiliar para informar sobre las consecuencias de problemas de adicciones y prevenir los embarazos de niñas”.
Asimismo, la cara visible de la REDIM, expuso que “sin importar el partido político, el desinterés por proteger a la niñez en México es nacional, por el lado del gobierno federal, como principal, que se olvida de los niños, niñas y adolescentes es más burdo, pero los gobiernos de los estados también se han olvidado de este sector de la población”.
En el mismo tenor, el titular de la REDIM subrayó que “desde antes de la pandemia ya estábamos enfrentando uno de los graves problemas que ha traído la COVID-19, que es la insensibilidad de las autoridades por proteger y velar por los derechos, necesidades y todos los factores que necesitan los niños para su desarrollo, lo que va en contra de su futuro como parte de la sociedad”.
“Lamentablemente todos esos problemas que ya teníamos se han agudizado, y hemos hecho un llamado para que se replanteen los objetivos (del gobierno) con una visión distinta frente a esta situación indeleble en medio de la COVID. Es decir, el mundo científico está planteando que a pesar de los esfuerzo para controlar la COVID-19, se vean las cosas de acuerdo a las necesidades locales, porque en cada país o región hay epidemias que con las brechas de desigualdad, como en México, donde el confinamiento al que se han enfrentado los menores en este año, ha mermado en su desarrollo al privarlos de la convivencia social en la escuela, con sus compañeros y profesores, lo que ha afectado en sus desarrollo”.
APRENDIZAJE.
Sobre este factor, el titular de la REDIM subrayó que “el confinamiento al que se han enfrentado los niños, niñas y adolescentes les ha ocasionado un grave daño cognitivo que ha reducido su nivel de aprendizaje, lo que va relacionado por la falta de interacción social con sus compañeros y en el desarrollo de sus diferentes habilidades por falta de esa interacción social y educativa, que como integrantes de una sociedad necesitan y que se ha visto afectada por llevar una vida sedentaria”.
“Los niños para crecer y desarrollarse físicamente necesitan esa interacción social con movimiento que les da la convivencia escolar, lo que no les ofrece el estar aprendiendo de manera virtual y al estar mucho tiempo expuestos frente a una pantalla de TV, lo que a su vez frena su desarrollo y afecta su salud con todos los riesgos que esto implica”, refirió Juan Martín García, al agregar que incluso derivado del confinamiento ocasionado por la pandemia, “se han expuesto casos de ansiedad en niños e incluso hay reportes de menores y adolescentes con eventos suicidas por pasar tiempo encerrados, por el alejamiento con sus compañeros de escuela y algunos factores de alejamiento social, como el no haberse despedido de sus compañeros el último día de clases, tanto en primaria, secundaria y bachillerato, e incluso en jóvenes de nivel licenciatura, que no han recibido su título aún por de fin de su carrera”.
EDUCACIÓN.
¿Existe algún registro de deserción escolar por causa de la pandemia?
“De forma oficial no lo hay. Nosotros los estamos solicitando y siguiendo. Existe un comentario en los medios en los que se habla de la educación a nivel superior, de agosto del 2020 en donde se dijo que se había perdido contacto con el 10 por ciento de la población de educación básica y con el 20% de estudiantes del nivel media superior, eso contemplaba los 4 millones de niños, niñas y adolescentes. Sin embargo, al inicio del ciclo escolar pasado, las autoridades responsables debieron haber presentado los resultados públicos y oficiales sobre cuantos estudiantes se inscribieron y cuántos ya no aún no lo han hecho, porque el costo político de ello será importante”.
Sobre este punto y de acuerdo con el informe “El Impacto de la Pandemia COVID-19 en los derechos de la infancia en México, desafíos y oportunidades” presentado en 2020 por la REDIM, el cierre de las escuelas por causa de la pandemia afectó a 25.5 millones de estudiantes de educación básica y 5.2 millones de educación media superior. En total, 4.8 millones de niños en nivel preescolar, 14 millones de educación primaria y 6.5 millones de educación secundaria.
A estos puntos se suma el factor violencia contra los menores, que de acuerdo con el informe “El Impacto de la Pandemia COVID-19 en los derechos de la infancia en México, desafíos y oportunidades” presentado en 2020 por la REDIM, se expone que en México, durante 2020 el 63% de los niños y niñas han experimentado una forma de disciplina violenta, y el 10% en edades de los 14 a los 17 años reporta haber sido víctima de alguna forma de violencia sexual.
Asimismo, entre enero y octubre del año pasado, 10,198 personas de entre 0 a 17 años fueron víctimas de lesiones; 1971 fueron blanco de homicidios; 1,426 fueron blanco de corrupción de menores; 221 de trata de personas; 163 de extorsión; 93 de feminicidio; 92 de rapto y 68 de secuestro. (La Crónica de Hoy)