Por: Lesly Mellado May
E l municipio de Puebla encarna una paradoja: es el segundo lugar nacional con el mayor número de pobres pero el 99% de la población tiene acceso a carreteras pavimentadas. El dato fue revelado esta semana por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) en el estudio Grado de accesibilidad a carretera pavimentada 2020.
La alta concentración de población en las grandes localidades de los municipios con mayor cantidad de personas en situación de pobreza y la disponibilidad de infraestructura vial con la que cuentan provoca que casi la totalidad de los habitantes (99%) tengan Grado de accesibilidad a carretera pavimentada alto o muy alto. Estos municipios son: Ecatepec de Morelos (Estado de México), Puebla (Puebla), Iztapalapa (Ciudad de México) y León (Guanajuato).
En estas cuatro demarcaciones, el organismo ha detectado que la mayor carencia es el acceso a la seguridad social y a servicios en la vivienda, así como un ingreso por debajo de la línea de bienestar.
A pesar de la pobreza en la capital poblana, está al nivel de localidades con gran capacidad de actividad económica (medida por el personal ocupado total) cuentan con un Grado de accesibilidad a carretera pavimentada muy alto, ya que tienen gran disponibilidad de transporte público, carreteras y una oferta amplia de servicios.
Entre estas se puede mencionar a: Cuauhtémoc, Ciudad de México; Guadalajara, Jalisco; Monterrey, Nuevo León; Tijuana, Baja California, y Ciudad Juárez, Chihuahua.
Otro es el panorama de la zona metropolitana de Puebla, pues no está incluida en las de mayor acceso, como sí lo está el vecino estado de Tlaxcala. En cuatro zonas metropolitanas de México más de 97% de sus localidades tienen Grado de accesibilidad a carretera pavimentada alto o muy alto: Mérida, Cuautla, Tlaxcala-Apizaco y Moroleón-Uriangato.
A nivel estatal, Puebla se ubica en la media nacional y lejos de Chiapas (1.2 millones), Oaxaca (849,882) y Veracruz (855,245), que son los estados con mayor cantidad de población con Grado de accesibilidad a carretera pavimentada bajo o muy bajo en 2020.
El Coneval destaca que la ausencia o mala condición de este tipo de infraestructura genera un aislamiento geográfico que repercute en el bienestar de las personas, por ejemplo: ocasiona mayor dificultad para el intercambio de mercancías, el abastecimiento de productos básicos de consumo, para acceder a los servicios públicos de salud, educación o a trámites administrativos (tan importantes como son el registro de nacimientos o los relacionados con el registro de la propiedad); lo anterior, a largo plazo, incide en los niveles de pobreza de la población.
A primera vista el estudio indicaría que el gobierno municipal y el estatal debería invertir menos en infraestructura urbana para la capital poblana y más en desarrollo económico; también derribaría el argumento de que dotar de vías de comunicación genera automáticamente crecimiento económico.