Adolfo Flores Fragoso / [email protected]
Son alguaciles demócratas recientemente electos en los Estados Unidos. Y han tomado una importante decisión: cortar lazos con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés).
Pronto asumirán sus cargos en algunos de los condados más poblados de Georgia y Carolina del Sur, después de derrotar a los republicanos de línea dura, gracias al tradicional voto diferenciado, como ha sucedido recientemente en México, aunque la mayoría de los “analistas” mexicanos no entienda la diferencia entre el “ánimo” local y el federal.
Pero ese es otro tema. Todos estos alguaciles han prometido poner fin a los acuerdos con el gobierno federal estadounidense, respecto a que ellos pueden interrogar a las personas sobre su estado migratorio y detenerlas por cargos violatorios a las leyes de inmigración.
Eso ya no.
Hay que recordar que estos llamados Acuerdos 287, de la sección de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, son anteriores al presidente Donald Trump. Los impuso y amplió el exvicepresidente Joe Biden, con el respaldo de Barack Obama, dando continuidad -a su vez-, a una ley expedida por Bill Clinton.
¿Lo sabías?
Y si bien Donald Trump amplió ese “programa” antiinmigrante número 287, a través de una orden ejecutiva durante las primeras semanas de su mandato, que le permitió firmar más acuerdos de este tipo con las policías locales para arrestar y detener a inmigrantes indocumentados, el promotor del mismo fue el virtual nuevo presidente Joe Biden.
Este es el contexto real del sentimiento de Biden respecto a la inmigración “ilegal”, especialmente la mexicana.
Una visión antimexicana poco analizada de este personaje por los “analistas”.
De hecho, por una “alianza” involuntaria Biden-Trump, provocaron que tan sólo durante el año fiscal 2019, las policías locales estadounidense detuvieran, encarcelaran y extraditaran a casi 25 mil inmigrantes indocumentados. La mayoría, mexicanos.
Pero el punto es, ¿por qué los alguaciles demócratas deciden romper con el ICE? Contextualizo con un ejemplo: en el condado de Gwinnett (Georgia), el demócrata Keybo Taylor, comandante de la policía, se impuso siempre sobre el alguacil adjunto republicano Lou Solis. Pese a que pueda leerse contradictorio.
¿Por qué?
Porque el Acuerdo 287 del condado fue utilizado de manera personal y “autónoma” para detener, encarcelar y expulsar a casi 21 mil personas con la complicidad del ICE en sólo diez años.
Así fue como Georgia fue convertido en uno de los socios locales más grandes de la federación que “cumplió con de la ley del ICE”.
Y obvio, la mayoría, mexicanos. Aquí hay un tema a destacar: en agosto pasado, en un discurso de campaña, Biden prometió que las acciones del ICE serán “menos agresivas”. Qué extraño: nunca mencionó desaparecer las leyes y acuerdos que él mismo fomentó con Barack Obama.
Una gran editora neoyorkina me lo dijo: “Obama es un blanco racista con piel negra. Y Biden, es un ultraconservador con sonrisa liberal”.