Anselmo Salvador Chávez Capó / Profesor Investigador de la UPAEP
Una de las noticias más recientes en el ámbito de los negocios, que ha puesto a pensar a muchos analistas económicos y financieros, es el incremento de la inflación.
Esta preocupación se debe a que esta variable económica incide fuertemente en el desempeño de la economía, debido principalmente a que representa una pérdida del valor adquisitivo de la moneda, lo cual limita la capacidad de compra a pesar de que a valores nominales (el que tiene marcada la moneda impreso o troquelado) es el mismo; su poder de compra se disminuye en la medida que esta variable se incrementa.
De acuerdo con la información de la primera quincena de abril, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que en la primera quincena de abril de 2021 el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una inflación de 0.06%, respecto a la quincena inmediata anterior; con este resultado la inflación anual se ubicó en 6.05%.
Dentro de este indicador el índice de precios subyacente tuvo un aumento de 0.18% ciento quincenal y de 4.13% anual; por su parte, el Índice de Precios No Subyacente presentó una disminución quincenal de 0.28% y un incremento de 12.21%.
Al interior del Índice de Precios Subyacente, a tasa quincenal, los precios de las mercancías crecieron 0.29 por ciento y los de los servicios 0.06 por ciento.
En el Índice de Precios No Subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 1.60 por ciento quincenal, mientras que los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno bajaron 1.61 por ciento quincenal, como resultado de los ajustes en las tarifas eléctricas dentro del esquema de temporada cálida en 18 ciudades del país.
Algunas de las observaciones que se pueden hacer al respecto son: La inflación no está fuera de control, a pesar de que el incremento que se presentó para la quincena en cuestión rompe los parámetros establecidos por Banco de México de 3% más o menos 1%; otro factor que incide en este comportamiento es el efecto de la acumulación de incrementos que se está presentando, los cuales se estima que a partir de mayo disminuirán.
Segundo, hay un efecto de acumulación de costos actual, derivado del incremento al precio de los energéticos y algunos agropecuarios que forman parte de la canasta básica desvaneciéndose gradualmente a partir de mayo.
Se debe señalar que Banxico es un órgano autónomo, por lo cual no deberá responder a las presiones que se presentan derivadas de la inflación, para modificar su política monetaria, sin embargo, se debe considerar que, de continuar con esta tendencia inflacionaria, se debería incrementar la tasa de referencia con la finalidad de contenerla para evitar una escalada en los precios Para las nuevas generaciones, sobre todo para los nacidos a partir de la década de los 90, esta preocupación parece exagerada.
Los que vivimos en la época de los 70, los 80 y la primera parte de los 90 aún recordamos con temor el incremento desenfrenado de los precios conflaciones mensuales de 10% en promedio, así como una inflación anual de 145%.
Esta realidad no la merecemos la gente de mayor edad ni deben vivirla nuestros jóvenes y niños. Mi mejor deseo es que cuando lean el concepto impuesto inflacionario, lo busquen en libro de economía, agradeciendo que nunca lo vivieron.