Alejandro Cañedo Priesca
Múnich, capital de Baviera, es una ciudad que combina a la perfección lo antiguo y lo moderno. Se le reconoce en el mundo por su historia, arquitectura, vida cultural y el internacionalmente famoso Oktoberfest.
Es un destino que ofrece algo para todos. Hoy te comparto una parte de la historia de la ciudad, sus principales atractivos turísticos y las actividades imprescindibles para disfrutar al máximo de esta ciudad.
La historia de Múnich se remonta al año 1158, cuando Enrique el León, duque de Sajonia y Baviera, fundó la ciudad a orillas del río Isar. La ubicación estratégica pronto la convirtió en un importante centro de comercio y poder en la región.
A lo largo de los siglos, la ciudad creció en importancia, convirtiéndose en la capital del Reino de Baviera en 1806.
Durante la Segunda Guerra Mundial, sufrió graves daños debido a los bombardeos, pero la ciudad se reconstruyó meticulosamente, restaurando muchos de sus edificios históricos y conservando su encanto antiguo.
Hoy en día es una metrópoli moderna y próspera, que mantiene vivas sus tradiciones y su herencia cultural.
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Algunos de sus principales atractivos turísticos son:
1. Marienplatz y el Neues Rathaus. En el corazón de Múnich se encuentra la Marienplatz, la plaza principal de la ciudad desde 1158. Aquí, los visitantes pueden admirar el imponente Neues Rathaus (Nuevo Ayuntamiento), con su famoso carillón que atrae multitudes diariamente. La plaza está rodeada de tiendas, restaurantes y cafés, lo que la convierte en un lugar ideal para comenzar a explorar la ciudad.
2. Catedral de Nuestra Señora (Frauenkirche). A pocos pasos de Marienplatz se encuentra la Frauenkirche, la catedral de Múnich. Este emblemático edificio, con sus distintivas torres gemelas, es uno de los puntos de referencia más reconocibles de la ciudad. Desde lo alto de las torres, los visitantes pueden disfrutar de una vista panorámica impresionante de Múnich y los Alpes bávaros en el horizonte.
3. Palacio de Nymphenburg. Este palacio barroco, ubicado en las afueras de la ciudad, fue la residencia de verano de los reyes de Baviera. Rodeado de vastos jardines, el Palacio de Nymphenburg es un lugar perfecto para pasear y disfrutar de la arquitectura y el arte real. Los interiores del palacio, que incluyen la famosa Galería de Bellezas, son igualmente impresionantes.
4. Odeonsplatz y la Residenz. La Odeonsplatz es una de las plazas más elegantes de Múnich, rodeada por edificios históricos como la Feldherrnhalle y la Iglesia de los Teatinos. Cerca de ahí se encuentra la Residenz, el palacio urbano más grande de Alemania, que sirvió como residencia de los duques, príncipes y reyes de Baviera. Hoy en día, es un museo que alberga una extensa colección de arte y tesoros reales.
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5. Jardín Inglés (Englischer Garten). Uno de los parques urbanos más grandes del mundo, es un oasis de tranquilidad en medio de la ciudad. Con extensas áreas verdes, lagos, y cervecerías al aire libre, es un lugar popular tanto para los residentes como para los turistas. Aquí también se puede encontrar la Torre China y el Monopteros, una estructura de estilo griego con vistas espectaculares del parque.
6. Museo Alemán (Deutsches Museum). El Museo Alemán es el museo de ciencia y tecnología más grande del mundo. Con exposiciones que abarcan desde la aviación hasta la informática, es un lugar fascinante para todas las edades. Las exhibiciones interactivas y las demostraciones en vivo hacen que la visita sea tanto educativa como entretenida.
7. Viktualienmarkt. Este mercado al aire libre es una visita obligada para los amantes de la gastronomía. Con más de 140 puestos que venden desde frutas y verduras frescas hasta delicias bávaras tradicionales, es el lugar perfecto para probar lo mejor de la cocina local. También es un excelente lugar para comprar recuerdos y productos artesanales.
8. BMW Welt y el Museo BMW. Para los entusiastas de los automóviles, el BMW Welt y el Museo BMW son paradas esenciales. Aquí, los visitantes pueden explorar la historia de la icónica marca alemana, ver modelos de coches históricos y contemporáneos y disfrutar de exposiciones interactivas que muestran la innovación y el diseño de BMW.
Este destino ofrece una amplia gama de actividades, aquí te comparto algunas:
1. Oktoberfest. La ciudad es sinónimo del festival de cerveza más grande del mundo. Celebrado anualmente desde 1810, atrae a millones de visitantes que disfrutan de la bebida bávara, la comida tradicional y la música en vivo. Aunque el Oktoberfest es el evento más famoso, Múnich alberga numerosos festivales y eventos durante todo el año, que también vale la pena explorar.
- Tour de cervecerías. Además de Oktoberfest, Múnich es famosa por sus cervecerías históricas. Un tour por algunas de las cervecerías más famosas, como Hofbräuhaus, Augustiner y Paulaner, ofrece una experiencia auténtica. Aquí, los visitantes pueden degustar una variedad de cervezas locales mientras disfrutan de la hospitalidad bávara.
- Paseo por el río Isar. El caudal atraviesa Múnich y ofrece un entorno ideal para paseos tranquilos, ciclismo o incluso para disfrutar de un picnic. Durante los meses de verano, es común ver a los locales relajándose en las riberas, nadando o paseando en balsas.
- Excursión a los Alpes Bávaros. Múnich es la puerta de entrada a estas montañas donde una excursión de un día es una actividad popular. Lugares como Garmisch-Partenkirchen, el Zugspitze (la montaña más alta de Alemania) y los castillos de cuento de hadas como Neuschwanstein están a poca distancia y ofrecen paisajes espectaculares.
- Exploración de los Museos. Además del Museo Alemán, Múnich cuenta con una impresionante variedad de recintos y galerías de arte. La Alte Pinakothek, la Neue Pinakothek y la Pinakothek der Moderne forman un trío que abarca desde el arte clásico hasta el moderno. Para los amantes de la historia, el Museo de la Ciudad de Múnich y el Museo de la Resistencia Alemana son también visitas recomendadas.
¡Viajemos juntos!