Soliloquio
Felipe Flores Núñez
Fue la que concluye una semana singular, que comenzó con un gris domingo por la desmesurada expulsión de ceniza en el volcán Popocatépetl que alteró la cotidianidad poblana, y concluyó con el gran anuncio de la construcción de una nueva Ciudad Universitaria de nuestra máxima Casa de Estudios.
Entre los extremos de ambos acontecimientos, en la semana creció la expectativa por las elecciones del domingo próximo para las gubernaturas del Estado de México y Coahuila, en cuyo trance por cierto gravitan algunas consecuencias que atañen a Puebla.
De la contingencia del Popo, cuyo efecto va en disminución para fortuna de todos, se rescata la capacidad de maniobra que dejó ver el mandatario estatal, Sergio Salomón Céspedes, durante los días aciagos, quien al asumir un puntual liderazgo pudo contener la posibilidad de que se llegara al pánico colectivo.
El gobernador fue prudente, transmitió serenidad y supo dimensionar el acontecimiento con medidas oportunas en varios ámbitos, entre las que destaca la suspensión de clases en los municipios más próximos al coloso.
La reanudación de clases presenciales, por cierto, será este mismo lunes en casi 4 mil 500 escuelas de 40 municipios, en los que cursan más de un millón de escolares bajo la instrucción de 57 mil docentes.
De modo institucional, durante la semana hubo además estrecha cercanía con las instancias del gobierno federal, incluso con el propio presidente Andrés Manuel López Obrador, quien movilizó a la zona de riesgo a un buen número de elementos de la Defensa Nacional ante la posible necesidad de una evacuación.
Otro acierto fue haber mantenido cabalmente informada a la población respecto a la evolución del incidente volcánico mediante mensajes por redes sociales, entrevistas y conferencias de prensa, además de haber sido tajante para contener versiones que intentaron insinuar que se enfrentaba a una catástrofe casi tan devastadora como la que ocurrió en Pompeya.
El buen manejo del suceso propició expresiones de solidaridad de otros sectores sociales –comerciantes, empresarios, universidades- lo que finalmente fortaleció el propósito de unidad a favor de Puebla al que se ha empeñado el Ejecutivo estatal desde que llegó a Casa Aguayo.
La contingencia no ha concluido y nadie puede asegurar que los riesgos mayores han sido superados, pero la experiencia de esta semana dejó ver que hay capacidad de respuesta por parte de la estructura gubernamental y que, de ser el caso, el fenómeno volcánico se puede afrontar con prontitud y eficiencia.
Al otro extremo de la agenda semanal, decíamos, llegó la inesperada noticia de que la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, apoyada con importantes recursos por el gobierno estatal, construirá para el 2024 un nuevo campus en la zona de Valsequillo.
Apenas repuestos por la exitosa consulta entre la comunidad universitaria para renovar y actualizar la legislación institucional, documento que sin mayor trámite deberá aprobar el Congreso del Estado en los próximos días, caló por su enorme significado el anuncio de una nueva Ciudad Universitaria para más de 20 mil alumnos.
Se trata, nada menos, de una inversión de mil 200 millones de pesos que compartirán a partes iguales la administración universitaria y el gobierno del estado para edificar un gran complejo de alta escala en materia de desarrollo urbano, planificación y arquitectura, que además habrá de generar variados polos de desarrollo.
Pero sobre todo, la BUAP estará así en condiciones de resolver quizá uno de los problemas mayores que ha enfrentado durante varias décadas, que tienen que ver con la capacidad de atender la creciente demanda de alumnado, lo cual cristalizará holgadamente ese justo reclamo social, situación que colocará a la legendaria institución educativa poblana a la vanguardia nacional.
Según lo anunciado, Ciudad Universitaria 2, Ecocampus de Ingenierías y Ciencias Naturales de la BUAP, estará listo para que el periodo 2024-2026 aloje a unos 5 mil nuevos estudiantes, cuya cifra se elevaría a 30 mil para el año 2029.
Un hecho histórico y un logro irrefutable de la rectora Lilia Cedillo Ramírez, que encontró en la sensibilidad y visión del gobernador Céspedes Peregrina al mejor aliado para beneficio de las próximas generaciones de poblanos.
El ambiente político adquirió al cierre de semana nuevos matices. De última hora, el Partido Verde decidió este sábado ir junto con Morena en la elección de la gubernatura de Coahuila, no así el PT cuyo candidato Ricardo Mejía, exsubsecretario de Seguridad federal, ha sido fustigado por el propio presidente López Obrador y hasta calificado de traidor. Este virtual rompimiento con la 4T podría rebotar en Puebla en perjuicio de los petistas que aspiran pelear por posiciones en el 2024, especialmente en el caso de la candidatura a la alcaldía de la capital, caso que atañe a Nora Merino y Antonio López.
A propósito, a todos sorprendió la premura de la dirigente en Puebla de Morena Olga Lucía Romero Garci-Crespo, al revelar que ya se inició el análisis de 15 aspirantes que se han acercado para buscar la candidatura a la presidencia municipal de la capital. El solo anuncio alborotó a la gallera y provocó fricciones entre los referidos petistas y los demás que aspiran a esa posición y que se sienten con más derechos, como Carlos Evangelista, Alejandro Carvajal Hidalgo, Iván Herrera Villagómez, Leobardo Rodríguez Juárez y Mayte Rivera Vivanco, entre otros.
En el panorama local transcurrieron durante la semana, otros más amables, entre los que figura el reconocimiento que se le hizo a Melquiades Morales Flores por su trayectoria plena de lealtad y contribuciones al ahora decadente Partido Revolucionario Institucional, oportunidad que no desaprovechó el exgobernador poblano para fustigar a quienes bajo el arrullo del canto de las sirenas se han refugiado fácilmente a Morena.
De hondo significado político también que el mandatario Sergio Salomón Céspedes haya recibido esta semana, así sea para un saludo y breve plática, a la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco, tan defenestrada aun en los mismos círculos morenistas. El gesto del gobernador le acredita que transita sin filias ni fobias y abona mucho a su actitud siempre concertadora.
No obstante, para los días que vienen también habrá que estar pendientes de cómo evoluciona la actividad volcánica del Popo, cómo transcurre la frontal disputa del presidente López Obrador con los Ministros de la Suprema Corte, si el propio presidente mantiene su inexplicable interés por adquirir a Banamex, si el Senado obedece el mandato de designar al Comisionado faltante para que pueda sesionar el INAI que preside la poblana Blanca Lilia Ibarra, si viene a Puebla Claudia Sheinbaum tras su cancelación por el incidente del Popo, y si la Fiscalía del Estado brinda resultados de su investigación por el lamentable asesinato del periodista de Tehuacán Marco Aurelio Ramírez.
Agenda repleta, suficiente para no aburrir a quienes están pendientes de lo que ocurre en el amplio escenario nacional.