Tal como lo muestra la imagen antigua, en 1976 fueron trasladados los restos del General Ignacio Zaragoza del panteón de San Fernando, en la Ciudad de México, al mausoleo que se encuentra en Puebla capital, en el que ayer se realizaban los últimos trabajos de mantenimiento previos a la ceremonia conmemorativa de la Batalla del 5 de Mayo de 1862.
El comandante del Ejército de Oriente falleció cuatro meses después de la victoria sobre el ejército invasor francés, víctima de tifus, que para ese tiempo no tenía cura.
Su sepelio, organizado por el presidente Benito Juárez, fue fastuoso y se realizó en la Ciudad de México.
Pero la entidad poblana reclamó tener en la zona histórica de Los Fuertes los restos del general y así fue concedido.