La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) expuso a las marcas de embutidos en México que no cumplen con lo que ofrecen en su etiquetado.
En la edición de agosto de la Revista del Consumidor, la Profeco señala que revisó diferentes aspectos de varias marcas de embutidos para constatar su garantía; entre los elementos a estudiar figuraron:
- Calidad sanitaria
- Calorías
- Carbohidratos
- Fécula
- Grasa
- Humedad
- Información al consumidor
- Proteína
- Sodio
- Tipo de carne
Asimismo, el organismo resaltó:
“Según el grado de calidad se emplean también otros ingredientes, además de las materias primas cárnicas, que sean más baratos. El precio siempre va acorde al tipo de jamón” [sic].
De acuerdo con los resultados, la Profeco determinó que las marcas que no cumplen con lo que ofrecen son:
- Parma Campestre, jamón de pierna/250 gramos
Se ostenta como fino, pero contiene fécula que, según esa clasificación, no debe tener
- Cuadritos, jamón Virginia de pavo/a granel
No cumple el porcentaje de proteína libre de grasa
- Parma Sabori, jamón Virginia de pavo/250 gramos
No cumple con 25 por ciento de reducción de sodio para ser ‘reducido en sodio’
- San Rafael, jamón real de pierna /300 gramos
Contiene almidón, pero no declara en sus ingredientes
- Bafar, jamón de pavo /400 gramos
Tiene 4.7 por ciento menos producto
- Duby, jamón cocido de pavo/500 gramos
Tiene 4.6 por ciento menos producto
Se denomina jamón cocido de pavo, pero la totalidad de la carne utilizada no corresponde a muslo de pavo
Con información de Milenio, Énfasis y Primera Vuelta Noticias
Portada: Pixabay
Fotos interiores: Pixabay