Hugo Arquímedes González Pacheco M. / [email protected]
El empresario Ricardo Salinas Pliego se encuentra como mandamás en la educación de México, imponiendo a su empleado de lujo en la Secretaría de Educación Pública (SEP), Esteban Moctezuma; lo pone en el ojo del huracán, una vez más luego que en diversos medios se dio a conocer que el Colegio Humanitree, del cual es dueño Salinas, sigue impartiendo clases presenciales pese a la pandemia de COVID-19, vemos cómo sus empresas son protegidas por la 4T.
A mediados de marzo, el titular de la SEP, Esteban Moctezuma, anunció la suspensión de clases a Nivel Básico, Medio Superior y Superior, por el incremento de casos de COVID-19 en la República Mexicana, desde entonces, más de 30 millones de estudiantes de colegios públicos y privados que han tenido pérdidas económicas han permanecido en sus casas, tomando clases a distancia con su modelo Aprende en Casa.
Sin embargo, el colegio Humanitree en su Centro Comunitario de Aprendizaje, que se encuentra en la calle Sierra Madre, en la colonia Lomas de Chapultepec –donde están los terrenos más caros de América Latina en Ciudad de México–, está desobedeciendo esa indicación gubernamental o es un privilegio seguir mintiendo con su educación de equidad y calidad, minimizando la pandemia que vivimos. De acuerdo con el diario El País, el martes 10 de noviembre pudieron presenciar una enorme fila de autos esperando ingresar a sus instalaciones para que los alumnos reciban sus clases presenciales.
Un factor que ha desatado aún más la polémica es el tema económico relacionado con la escuela Humanitree, la cual de acuerdo con reportes, es uno de los colegios más caros en México, con colegiaturas que van desde los 15 mil a los 17 mil pesos mensuales, pese a las constantes denuncias se le va a perdonar, disculpar o argumentar que están en apego a la ley y sus derechos de seguir lucrando con su Fundación Azteca.
Según menciona el diario, consultaron a la Autoridad Educativa federal en Ciudad de México (AEFCM), que pertenece a la SEP, quienes aseguraron que realizan operativos para verificar que ninguna escuela de clases y que en Humanitree no dan clases, sino apoyo administrativo, pese a la evidencia que documentó El País y que ahora las televisoras que no son de TV Azteca tienen grabadas, el secretario de Educación titubeó o no supo qué decir ante los medios, sólo que se va investigar.
Salinas Pliego ya tiene un largo historial desestimando a la corrupción de su filantropía; en la televisora de la que es dueño, emitieron un par de reportajes donde pedían el regreso a clases y denunciaban que mantener a los niños en su casa sólo era un capricho del gobierno, del cual se ha beneficiado con contratos millonarios, incluyendo el de las emisiones de Aprende en Casa II.
Sin embargo, Salinas Pliego, dueño de Grupo Salinas, dio nuevamente de qué hablar, pues logró obtener un contrato multimillonario con la SEP, por 969 millones de pesos, a través de su compañía de Seguros Azteca, ya que le dieron millones de pesos a su Banco Azteca para el pago de las becas a los estudiantes de preparatoria, con retardo de meses gran negocio de intereses.
Recientemente, Ricardo Salinas Pliego notificó que se había contagiado de COVID-19, llamó a no tener miedo asegurando que toda la población debía contagiarse, mandando un claro mensaje entre líneas que las actividades cotidianas deben continuar pese al virus. De esta manera, bajo ese mensaje de salir sin miedo y a pesar de los contagios y defunciones que registra el país, es como opera el Colegio Humanitree, tras una nueva campaña en la televisora del Ajusco, hablando del impacto negativo de tener cerrados los colegios en México, lo cual era considerado como un retroceso educativo sin mencionar que él, es parte de la corrupción en la 4T de la educación del país.
Sin embargo, a partir de agosto de 2018 AMLO, como presidente electo, comenzó a tranzar con el dueño de Grupo Salinas para acordar el “traslado operativo” de las orquestas infantiles, con las que lucró política y fiscalmente, ahora con la Nueva Escuela Mexicana. Esta iniciativa fue impulsada por el actual secretario de Educación, Esteban Moctezuma, fiel lacayo de Salinas Pliego y promocionada en sus videos para Consejo Técnico Escolar, una vergüenza de la equidad artística de millones de niñas y niños de la Educación Básica.
Estos vínculos de Moctezuma con Salinas Pliego, que llevan más de 25 años, muestran un claro conflicto de intereses en la celebración del reciente contrato, en el cual ponen en medio la educación pública. Aunque López Obrador no contempla en su Plan Económico de Emergencia, el salvataje de las grandes empresas, el gobierno a través de la SEP realiza en este caso un salvataje encubierto a Grupo Salinas.
Resulta indignante que en una escuela de nivel básico sea un viacrucis activar el seguro en caso de accidentes para los estudiantes; así también la infraestructura de las escuelas, muchas de las cuales se están cayendo a pedazos, siguen dañadas después de los sismos de 2017 o son de por sí ultra precarias, sin servicios básicos etcétera, e inclusive que se llame a los padres y madres a poner pintura o reparaciones, mientras cientos de millones de pesos, que deberían destinarse a revertir estas situaciones, son entregados a Grupo Salinas.
Qué casualidad, además, que este contrato millonario, según para proteger el patrimonio escolar, se cierre justo en medio de una creciente crisis económica, cuando antes –ya suspendidas las clases y en plena Fase 2 de la contingencia– se obligó al personal administrativo y de servicios a hacer guardias en las escuelas, poniendo en riesgo su salud y la de sus familias.
Consideramos necesario exigir al gobierno que paren este tipo de salvatajes encubiertos a las empresas. Los recursos deben destinarse para combatir la pandemia y para garantizar condiciones de seguridad sanitaria en las escuelas hacia el regreso a clases: más salones y plan de construcción para reducir la cantidad de estudiantes por grupo y que pueda mantenerse la sana distancia, medida elemental para prevenir contagios las primeras semanas luego del aislamiento, además de agua potable, jabón, alcohol en gel, médicos permanentes en las escuelas, entre otras algo imposible, como auditar a las empresas Salinas y su Fundación Azteca.
¿Usted qué opina, estimado lector?