RECLAMO
El amago de un paro por una añeja demanda salarial que promueve personal administrativo y médico del Hospital del Niño Poblano es otro de los enredos que fueron heredados de la época del morenovallismo y, en este caso, el responsable es Jorge Aguilar Chedraui, en aquel entonces secretario de Salud, por cierto, acusado ahora de un desfalco en su paso como legislador.
Y es que cuando atrajeron al HNP al sistema estatal de salud “olvidaron” homologar los salarios, que son actualmente los más bajos del sector, además que el personal no ha recibido incremento desde hace más de seis años, por lo que su demanda está más que justificada y lo deseable es que se regularice.
ADVERTENCIA
En la víspera de la noche mexicana, hizo bien el gobernador Luis Miguel Barbosa en advertir a los poblanos no caer en relajamientos y exhortar que los festejos entre amigos y familiares se hagan de manera responsable, incluso virtuales.
El llamado lo hizo al ilustrar casos concretos registrados en Europa, donde la sociedad volvió a sus actividades normales y ello ha derivado en un rebrote de COVID-19, al extremo que Israel ya se convirtió en el primer país en retomar las medidas de confinamiento total.
QUEJAS
Diversas empresas poblanas dedicadas al autotransporte, en especial las dedicadas a trasladar mercancía por carretera, se han sumado al reclamo hacia autoridades federales por el excesivo hostigamiento y, en todo caso, exigen mejores condiciones de las vías de comunicación, en especial mayor seguridad.
A través de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas cuestionan los recientes operativos de la Policía Federal, en los que son sometidos a verificaciones físico-mecánicas de luces, dirección, frenos, combustible, escape, suspensión, chasis, ruedas, rines, llantas y parabrisas, de modo que casi nadie se escapa de las altas multas.
CHIQUITOS
Son de vergüenza las acciones de inconstitucionalidad que ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación promovieron los partidos del Trabajo y Movimiento Ciudadano, contra la reforma electoral que aprobó el Congreso del Estado y que les quitó privilegios inmerecidos.
Ante la muy posible pérdida de posiciones, el PT pretende recuperar la figura de primera minoría, “el gran perdedor”, que da una diputación a quien perdía una elección pero tenían mayor número de votos en su partido, mientras que MC está en contra de los bloques de competitividad para candidaturas.