La noche del 14 de septiembre de 1968, cinco trabajadores de la BUAP fueron linchados por habitantes de San Miguel Canoa, instigados por el sacerdote del lugar y por las profundas diferencias que había entre pobladores.
El cineasta Felipe Cazals, en 1975, presentó su película Canoa, en la que denuncia este hecho calificado de vergonzoso, pues hasta la fecha no hay castigo para los autores materiales e intelectuales, de los cuales sólo hubo un sobreviviente.
Hoy se cumplen 53 años y la junta auxiliar sigue estigmatizada por los asesinatos de jóvenes que lo único que querían era ir de excursión a La Malinche.
Imágenes de la película Canoa.