Mario Galeana
Del mismo modo en que las plantas eligen una región particular para florecer, el arte popular brotó cual fruto en regiones específicas de Puebla.
En la capital se popularizaron los talleres de talavera, en la Mixteca se aprendió a modelar y bruñir el barro y a manipular la palma; en las serranías, el telar de cintura se heredó como gema familiar y, en el extremo norte, sobre los últimos pueblos de la geografía poblana, picar el papel era igual que redactar un tratado.
A lo largo del estado, durante generaciones se han formado grandes maestros artesanos que trabajan con la talavera, el vidrio soplado, el barro, el amate recortado, el bordado, los hilos de lana, la palma, el acero, la plata y el ónix.
Una muestra del arte popular que ha florecido por todo el estado se encuentra en la exposición “Saberes: arte, tradición y diseño, disponible en la Galería del Palacio Municipal de Puebla capital.
En la exhibición se incluyen obras elaboradas a partir de 17 técnicas por 42 artistas de Cuetzalan, Tetela de Ocampo, Tlatlauquitepec, Hueyapan, Teziutlán, Huejotzingo, San Martín Texmelucan, Pahuatlán, Huauchinango, Yaonáhuac, San Nicolás de los Ranchos, San Pedro Cholula, San Andrés Cholula, Izúcar de Matamoros, Acatlán de Osorio, Chigmecatitlán, Huatlatlauca, Molcaxac, Tepexi de Rodríguez, Los Reyes Metzontla y Tehuacán.
En la exposición se rinde un homenaje particular a Santos Rojas Canteras, originario de San Pablito Pahuatlán, un maestro artesano que hizo representaciones de la cosmovisión indígena otomí a partir de papel picado extraído de la corteza de una morera.
También se resalta el trabajo de Pedro Pineda Palacios, de Santa María Chigmecatitlán, perteneciente a la población mixteca o nación Ñuu davi, donde ancestralmente se ha enseñado el tejido de palma.
Junto al montaje museográfico, la exhibición contempla una expo-venta del trabajo de los artesanos poblanos durante los fines de semana.