Por: Maurice Geitani y Gunter Bahren/ @GeitaniMaurice @BahrenGunter
LA NBA, A FAVOR DE MORE THAN A VOTE
La lucha racial es la constante en el deporte hoy, ahora con un poco más de fuerza que el mismo COVID-19. No solamente en la NFL se pueden ver luchas personales como la de Colin Kaepernick.
La NBA y LeBron James están haciendo su parte. Esta semana salió a la luz su tenaz lucha que busca que los ciudadanos afroamericanos voten en los próximos comicios, pero no sólo es votar por votar, lo que en realidad busca es que se haga conciencia y una diferencia el 3 de noviembre, en las elecciones presidenciales.
En días pasados varios deportistas y algunas celebridades se unieron en una asociación para promover el voto de los estadounidenses negros de cara a las próximos comicios. “Es la hora de que finalmente marquemos la diferencia”, dijo el alero de Los Ángeles Lakers el pasado miércoles en una entrevista con el The New York Times.
De igual manera, los miembros de dicha asociación utilizarán sus redes sociales personales como una plataforma para prevenir sobre cualquier intento de boicot en el derecho al voto de las minorías en el país. Esperemos que ésta decisión no les juegue en contra en algún punto.
“Sí, queremos que salgas a votar, pero también te daremos el tutorial”, dijo LeBron, tres veces campeón de la NBA, esto impulsado por la asociación, bautizada More than a vote (Más que un voto).
Financiada personalmente por LeBron, la asociación incluirá a otros deportistas como Trae Young, actual estrella de los Atlanta Hawks; el exjugador y comentarista televisivo Jalen Rose; Alvin Kamara, jugador de los Santos de Nueva Orleans de la NFL, y celebridades como el comediante Kevin Hart, quien asistió a la ceremonia de homenaje a George Floyd, muerto hace un mes bajo custodia de la policía.
Donativos millonarios como el de Michael Jordan son solamente una muestra de lo que el movimiento generará, de la mano de otros grupos civiles que promueven el voto como We All Vote y Fair Fight.
James seguirá su lucha racial. Sabemos que James cuenta con el apoyo del mundo deportivo y sus compañeros de la NBA no lo dejarán sólo en esta lucha, como Draymond Green, una de las figuras de los Golden State Warriors, que sorprendió en pasados días al declarar para “First Take”, programa que se emite por ESPN, y pedir por una candidatura a presidente de LeBron James.
“Como competidor disfruto jugando contra él. Pero lo que ha hecho fuera de la cancha con su liderazgo en varias iniciativas merece todo mi respeto. Con suerte, espero que se presente para presidente de los Estados Unidos algún día”, dijo.
No sabemos si llegará a ser presidente, o por lo menos lograr una candidatura, pero lo que sí sabemos es que su lucha está más fuerte que nunca y cuenta con el apoyo total de compañeros y celebridades.
Esperemos que More than a vote sea el detonante que la comunidad afroamericana necesita y los lleve a una igualdad total. Mientras unos luchan por todo un país, otros como Dak Prescott buscan su propia lucha ahora que firmó como jugador franquicia con los Dallas Cowboys. Parece que la telenovela Dak Prescott y Dallas está lejos de terminarse. El quarterback de 26 años de edad, nacido en Sulphur Luisiana y proveniente de la universidad de Mississipi State, estampó su rúbrica esta semana en contrato que le pone la etiqueta de jugador franquicia de la Estrella Solitaria.
Desde que terminó la temporada pasada y vencía su contrato de novato con Dallas, empezó el estira y afloja entre ambas partes y un mundo de rumores alrededor del tema.
Dak pide contrato de súper estrella con la única condición de firmar máximo por cuatro años, ya que sabe que después de este tiempo con 30 años de edad puede mejorar su sueldo aún más para terminar su carrera, sin embargo Dallas está en posición de darle el salario que pide, pero si firma un contrato a seis años.
Ambos están jugando sus cartas y al aproximarse las fechas límites para negociar, Dallas decidió etiquetarlo como jugador franquicia y así asegurar que juegue con ellos la temporada 2020 y ganar tiempo para llegar a un acuerdo con un contrato multianual.
Analizando los números del contrato, como jugador franquicia tiene asegurado en su posición 31.4 millones de dólares por temporada y lo que Dallas le ofreció es un contrato por cinco años y un total de 175 millones de dólares, lo que son 35 millones por año, nada despreciables, pero Dak piensa lo contrario y quiere ganar mínimo 45 millones en su quinto año y luego volver a renegociar.
Parece que la historia está lejos de terminar y mucho dependerá de que tan bien juegue la próxima temporada y que tan lejos lleguen los Vaqueros. ¿Qué opinan, merece Dak Prescott el contrato que pide o primero debe demostrar que lo vale?