Jesús Peña
La carencia por acceso a la alimentación nutritiva y de calidad en Puebla pasó de 24.5 a 30.8% entre 2018 y 2020, lo que se enmarca en que 44 de cada 100 habitantes viven en pobreza, sea moderada o extrema, reveló José Nabor Cruz Marcelo, secretario Ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Durante una ponencia, que compartió con Lizeth Sánchez García, secretaria de Bienestar estatal, el doctor en Economía por la UNAM precisó que estos datos deben entenderse en el contexto de la pandemia de COVID-19 y la contracción del ingreso laboral.
“A nivel nacional, en 2020 la carencia por acceso a la alimentación nutritiva y de calidad fue de 22.5%, mientras que para el estado de Puebla fue de 30.8% (…); la inseguridad alimentaria moderada se ubicó en 16.7%, mientras que la severa está en 10.6% y la población cuyo consumo de alimentos fue limitado está en 6.8%”, explicó.
Para dimensionar esta situación, Cruz Marcelo explicó la evolución de la pobreza en la entidad, al establecer que al cierre de 2018 había 3.8 millones de habitantes (58%) en dicha condición, de los cuales 3.2 millones (49.9%) vivían en pobreza moderada y medio millón (8.1%) en pobreza extrema.
Al finalizar 2020, primer año de la pandemia de coronavirus y año del censo que estableció en 6.5 millones el número de habitantes en el estado, 62.4% (4.1 millones) estaban en condición de pobreza, conformado en 49.7% (3.3 millones) como moderados y 12.7% (0.8 millones) como extremos.
Es así como se entiende que la carencia por acceso a una alimentación nutritiva y de calidad pasó de 24.5% a 30.8% de la población, de 2018 a 2020.
Con este dato se debe considerar el ingreso inferior al costo de la canasta alimentaria, pues en 2017 los trabajadores en esta condición eran 54%, la cifra bajó a 43% en el primer trimestre de 2020, antes de la pandemia de COVID-19, pero subió a 55% para final de ese año, mientras que 2021 concluyó con 52% y para segundo trimestre de 2022 la cifra bajó a 48.3%.
En agosto de este año, el valor de la canasta alimentaria urbana fue fijado en 2 mil 86 pesos y la rural en mil 600 pesos. En el mismo mes del año pasado costaban mil 828 y mil 399 pesos.
“La cebolla, papa, naranja, huevo fueron los alimentos de mayor incremento, pero son productos que se pueden dar en las pequeñas viviendas, son una opción real para fortalecer ingreso no monetario y los remanentes pueden generar un ingreso extraordinario. Es un acierto del gobierno de Puebla promover el consumo y los programas para generarlo”, dijo José Nabor Cruz.
Los productos con mayor decremento en su precio en la entidad fueron el jitomate, el frijol negro, manzana, azúcar y chile.
Respecto a la evolución de la pobreza nacional, 2018 terminó con 41.9% (51.9 millones de habitantes), divididos en 34.9% (43.2 millones) de pobreza moderada y 7% (8.7 millones) de extrema.
Para el cierre de 2020, a dos años de la actual administración federal, la cifra general se elevó a 43.9% (55.7 millones), conformada por 35.4% (44.9 millones) de pobres moderados y 8.5% (10.8 millones) extremos.
ESCENARIO NACIONAL
Los estados que encabezan la lista de población con más carencia de acceso a la alimentación nutritiva y de calidad son:
- Tabasco, con 43.3%.
- Guerrero, con 36.1%
- Oaxaca, con 33.3%,
- Tlaxcala, 32.9%
- Puebla, 30.8%
Las entidades con menor número de población vulnerable son:
- Baja California, 13.4%
- Chihuahua 13.5%
- Tamaulipas 14.1%
- Nuevo León 14.7%
- Jalisco, 14.8%