El Ayuntamiento de Puebla aseguró que no se afectará la reactivación económica de los comercios ubicados en el Centro Histórico de Puebla con la remodelación del zócalo capitalino, puesto que no se cerrará el acceso vehicular, aunado a que la duración de las obras será corta para evitar afectaciones.
En conferencia de prensa, el coordinador del Instituto Municipal de Planeación (IMPLAN), Gerardo Ríos Bermúdez, informó que sostuvieron reuniones con las diversas cámaras empresariales con personal de la Sedatu para detallar el calendario de obras y se les indicó que no podían iniciar las obras después de Semana Santa tal y como ellos pedían, por cuestión de logística.
“Lo que respecta a que las obras inicien después de Semana Santa, como lo solicitaron los comerciantes, ayer la Sedatu tuvo una reunión con ellos para explicarles las razones del porqué no pueden iniciar después de este periodo”, acotó.
Expresó que esta obra a cargo de la empresa Gilber S.A. de C.V tendrá una duración de siete meses, con miras de terminar en la segunda semana de septiembre, tiempo en el que no se cerrará el Centro Histórico y con acciones paulatinas para no afectar a los comercios de la zona.
Por su parte, la encarga del despacho de la Secretaría de Movilidad, Claudia Rubio Romero dio a conocer que solo se mantendrá cerrada la plancha del zócalo, mientras que cuando sea necesario se harán desvíos viales para no afectar los trabajos, los cuales se darán en fases.
Detalló que la fase uno se basa en los trabajos de la avenida Juan de Palafox y el desvío será en la calle 3 Sur y Reforma, la fase dos corresponde a la intervención de la Avenida 16 de Septiembre y el tráfico se desviará a la 3 Oriente, mientras que la fase tres, que corresponde a la calle 2 Sur, el desvío a la calle 3 Sur y Reforma.